2 de enero de 2013

Ojo con la incultura


El día de Anteayer, esto es, el año pasado, mientras esperaba como el resto de los chilenos el año 2013, en la tarde estaba haciendo zapping. Y de repente me detengo en el canal de Izquierda ARTV, en la que presentaban una obra de teatro. En dicha obra habían tres personajes, de los cuales un era hombre vestido con una chaqueta camuflada o militar y dos mujeres. El personaje masculino criticaba la guerra y el hecho de que chilenos y peruanos hayan peleado en la vida real, o en parte de la ficción que estaba en esa obra. En otra escena, aparecían las dos mujeres embarazadas. Los actores son Trinidad González, Paula Zúñiga y Jorge Becker. Es dirigida por Guillermo Calderón. La obra se llama ‘Diciembre’. Según los medios ha sido exitosa. Está ambientada en 1925.

 Después vino la parte donde s entrevistaban a los actores. El actor Jorge Becker dijo que la obra era contra la guerra y el fascismo que hay la sociedad chilena. A lo que agregaron una de las actrices, el clasismo chileno. El director dice a un medio: "Diciembre es una obra de ficción política que explora la realidad de la guerra y su poder transformador de la conciencia colectiva y la realidad doméstica de Chile", Y añade: "me interesa la guerra como contexto para explorar la violencia latente en nuestras sociedades y también el mundo de las relaciones domésticas". Esta es una de las obras del Festival de Teatro a Mil.

Volviendo a las declaraciones de Bécker, reparé en seguida que era absurda la propuesta. La guerra es mala. Sin embargo, a veces es el último recurso. Y si alguien desea esclavizar a otro, entonces, hay que quedarse de manos cruzadas. El afamado Stan Lee prefiero alistarse al Ejército en la Segunda Guerra Mundial, que quedarse en casa. Lee sería un fascista porque se alistó en el Ejército. Es ridículo poner la guerra como sinónimo de fascismo. Y luego clasificar a la sociedad chilena de fascista es más absurdo.

 En la misma línea de la obra anterior, apenas terminó el gobierno de Michelle Bachelet, su ex ministra de Cultura, la actriz Paulina Urrutia estrenó la obra de teatro ‘La Amante Fascista’ del director Víctor Carrasco y del productor Pablo Illanes, en la que “Iris Rojas es la esposa de un capitán del Ejército chileno. Ella, amante del Sr. Espina, espera la visita oficial que él realizará a la nortina provincia donde se encuentra destinada. El Sr. Espina es el hombre que liberó a Chile del marxismo con un régimen radicalmente militar. Chile es La Oficina, que también es el juego favorito del Sr. Espina. El cuerpo de esta mujer, tremendamente revolucionaria, también es un objeto en el inventario (de mujeres) del Departamento de Abastecimiento del Ejército chileno”. Cuando leí el título de la obra, pensé ingenuamente que se referían a las mujeres de la guerrillera latinoamericana. Sin embargo, no es así. En realidad, esta obra es un insulto a las mujeres que se han casado con militares.



 A los izquierdistas les gusta hablar del fascismo o de comparar a la Derecha chilena liberal conservadora con esa ideología de la década del treinta del siglo pasado; aunque no tengan nada que ver. Qué declaración más fascista fue la que escribió el guerrillero argentino, a quien viejos y jóvenes de Izquierda lo veneran religiosamente, Ernesto ‘Che’ Guevara, de que “el socialismo se llega con ríos de sangre”. Desde luego, que al mundo cultural chileno de la dramaturgia no se las va ocurrir ponerlo en ridículo, tanto a él como su proyecto político utópico. Ni siquiera el tabloide supuestamente irreverente ‘The Clinic’ del periodista Patricio Fernández, se ha burlado de la guerrilla chilena o los ha tomado para leseo, esto es, del Mir, del Frente Lautaro y del FPMR. ¿Por qué será? Después de todo, la guerrilla marxista leninista son las ‘víctimas del Gobierno Militar’. En cambio, el señor Fernández no tiene problemas en burlarse de las personas que fueron asignadas a la DINA y CNI en las portadas.

 El sesgo de los dramaturgos chilenos están evidente, en la obra“Que tiempos aquellos Fanta y Romo”. > Esta obra la hizo Claudio Pueller y Álvaro Pacull, director de Teatro de la Universidad del Desarrollo (UDD), que es una universidad de Derecha. La obra se basa en dos poemas importantes: “Imprecación a la bestia fascista” de Pablo de Rokha de 1937, que es dedicado a los republicanos de España y el poema de Gonzalo Millán ‘Mi ciudad’ de 1979. De nuevo el fascismo. Si la historia hubiese tomado un curso totalmente distinto, las obras mencionadas no existirían, pues tendríamos solamente el realismo socialista y el arte comprometido con el régimen comunista. Esta obra la hicieron porque los dos personajes de Izquierda trabajaron para los servicios de seguridad de Pinochet, esto es, se convirtieron en traidores ante la vista de sus compañeros. El primero está en la cárcel donde tienen encerrados a los militares y el segundo está muerto. Insisto, si los terroristas hubieran ganado, no tendríamos estas obras. Hasta tal vez, al Guatón Romo hubiera recibido el Premio Lenin de la Paz por sus servicios a la causa comunista.



A igual que el director y escritor del ‘The Clinic’, los dramaturgos de Izquierda no se atreven agarrar al leseo a Salvador Allende, el proyecto de la Unidad Popular, el personaje revolucionario o el guerrillero y a la propia guerrilla chilena.

 Igualmente, las películas del hijo del senador Larraín de la UDI, Pablo Larraín ‘Post Mortem’ y ‘Tony Manero’. En la primero, Alfredo Castro personifica a un funcionario del Servicio Médico Legal en la Unidad Popular, en que lo único que piensa es enamorarse de una mujer. En la segunda, está ambientada en la década del 70, período que la Izquierda llama ‘represión’. Unas palabras que me llamaron la atención que dijo Larraín a la prensa, si el personaje es cómplice de lo que llama ‘dictadura’: "Un hecho histórico así polariza fuertemente a la población. Aquél día la gente estaba muy confusa. Ahora sabes quién era el bueno y quién era el malo, pero entonces la información era muy desconcertante". A otro medio había dicho que su película no era política, sin embargo, emite juicios morales y políticos. El analfabeto director para complacer al progresismo, afirma “ahora sabes quién era el bueno y quién era el malo”. Los buenos son los que usaron la violencia y nos querían llevar a una dictadura comunista. Luego agregó: “esta película no pretende ser una declaración política ni un panfleto". No se lo cree ni el diablo.



 El documental ‘Pinochet’ fue un primer paso para acabar con la hegemonía de la Izquierda en la cultura. Ahora falta otro paso. Sería que se hiciera una comedia al estilo que hacen los norteamericanos que fuese punzante con los iconos y creencias de la Izquierda chilena. Estaba pensando en el humor que tiene la comedia de los ochenta Top Secret, donde actúa Val Kilmer. Supongo que a los zurdos que vieron esa película, se sintieron ofendidos con el retrato de la ex RDA, donde son comparados con los nazis. Comunistas y nazis es la cara y sello de la misma moneda. Por ejemplo, hace tiempo se me ocurrió una canción con la melodía de la canción ‘Pluma Gay’:

 “Soy guerrillero comunista
  Soy maricón
  Sólo yo tengo derecho de matar
  Porque soy idealista
  Si me matan, entonces es una trampa
  Soy una víctima de la sociedad
  Y de los derechos humanos

  Coro

  Soy guerrillero comunista
  Soy maricón
  (El guerrillero mueve el trasero como las mujeres)

  Si me miran feo
  Te denuncio a Lorena Fríes del INDH
  Por la ley de Anti discriminación
  Sólo yo puedo mirarte feo
  Porque soy un actor social
  Soy revolucionario
  Creo en la igualdad, mas en ley del embudo
  Angosto para los fachos, ancho para la Izquierda
  Yo te puedo funar

  Coro

  Soy guerrillero comunista
  Soy maricón

 Ojo con la incultura disfrazada de irreverencia, pedagogía y civismo. PD: Feliz Año Nuevo y Prosperidad para mis amigos argentinos.

4 comentarios:

Andy dijo...

Para la izquierda la guerra es mala, salvo que la hagan Lenin, Stalin, Mao, El Che, Fidel, las FARC, los Montoneros, el ERP, Sendero Luminoso, el Khmer Rouge....

Anónimo dijo...

Muy buen artículo sr. Bazán!
Feliz año para Ud.

VbB

Beto dijo...

Aca pasa lo mismo, tanto en el teatro como en el cine. Y ni loco se te ocurra criticarlos aunque la obra sea una bosta.

Me hizo acordar a este texto que anda dando vueltas desde hace un par de decadas:

XXI - EL ZURDO UNDERGROUND

http://www.blackwar.4t.com/XXI-zurdounder.htm

Javier Bazán Aguirre dijo...

Andy.
Así es.

Anónimo: Gracias.

Beto:
Lo veré.