Hoy escuché a tres periodistas, en tres distintas emisoras, hablar de fin de ciclo, de un gobierno que se despide, de un recambio en curso. Me parece que quedan al menos dos años más de éste gobierno inoperante, dañino y falaz, largos de cursar pero dos años al fin. ¿O hay algo que ellos saben y nosotros no?
6 comentarios:
Me parece que es pura expresión de deseos, Sire
Ojalá los periodistas tengan razón, don BB.
Anónimo, estoy casi seguro que es así, sólo expresión de deseos. Pero me llama poderosamente la simultaneidad y la homogeneidad del mensaje.
Hay muchas expresiones de deseo de que este gobierno termine, pero a nadie se le ocurre siquiera proponer un juicio político, algo que sería inédito como salida legal perfectamente constitucional y que sería un aleccionador antecedente para los próximos gobiernos. Hay unos okupas chorros en la Casa Rosada pero nooo… hay que ser “democráticos” y “respetar los tiempos institucionales” …mecachendié!
Gus: quién puede proponer un juicio político sin caer él mismo en la volteada?
La Carrió hace lo que puede, pero debe ser la única, o unas de las pocas, que no le teme a un juicio por corrupción o "carpetazo". Sola no puede hacer nada, más que denunciar y/o iniciar juicios que nunca terminan (o terminan como no deben)
Emma Peel
Emma: la verdad es que yo tampoco lo sé, supongo que debería ser alguna persona física o alguna entidad lo más ajenas posible al poder político para darle más transparencia y no ser sospechadas de “golpistas”, y que emergieran tras una gigantesca marcha espontánea del tipo de las que se venían haciendo, pero esta vez con el objetivo claro de pedir un juicio político a la runfla K. Esto de la movilización lo digo con un broche en la nariz porque me disgustan sobremanera este tipo de presiones callejeras, pero en este caso la veo necesaria porque El Gran Pueblo Argento sólo le otorga verdadera legitimidad a las cosas obtenidas así, a lo macho, poniendo masas de cuerpos en las plazas, nunca mediante la palabra o el sufragio.
De todos modos es muy probable que al final todo resulte inútil: después del juicio (¿con qué jueces?!) y puestos a elegir su sucesor, El Gran Pueblo Argento volverá a entronizar a otro H de P, es decir, a otro dilecto Hijo de Perón. Renunciar a esa patética identidad lo equipara a suicidarse, y de hecho sería realmente así, dependiente de la dádiva estatal que es.
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