ETERNO, Ministro sin cartera, había dejado de usar cartera, ahora se la llevava en carretilla. Como dice Sergio mas arriba una legión de hijos de puta afilando cuchillos para disputarse el cazigazgo. Otra que Juegos de Tronos.
Un emblema del corrupto aryentain style, que llegó al éxtasis en estos últimos años, lo que demuestra que este gobierno es el más corrupto entre los corruptos, producto de una lógica continuidad histórica.
Si fuera creyente desearía que lo reciba el mismo diablo, y que sirva para que tengan paz las almas de los honestos.
En la cultura argentina (aunque no sólo argentina) el poder es una patología. Por eso tenemos tantos casos en la política y en el sindicalismo de tipos que salen directamente del sillón para ir al cajón.
La terapia adecuada para esa enfermedad es la fortaleza institucional con sus mecanismos de contrapesos y recambios periódicos.
¿Pero quién se anima a ponerle el cascabel al gato?
10 comentarios:
La cartera se la robó hace tiempo.
La nuestra no la vamos a ver nunca.
Un pedazo de mierda menos; pero hay una legión para reemplazarlo.
ETERNO, Ministro sin cartera, había dejado de usar cartera, ahora se la llevava en carretilla. Como dice Sergio mas arriba una legión de hijos de puta afilando cuchillos para disputarse el cazigazgo. Otra que Juegos de Tronos.
Como pasó con Hugo Chávez, uno no se alegra por que se haya muerto sino porque por fin dejó de ocupar el puesto que ocupaba.
Un emblema del corrupto aryentain style, que llegó al éxtasis en estos últimos años, lo que demuestra que este gobierno es el más corrupto entre los corruptos, producto de una lógica continuidad histórica.
Si fuera creyente desearía que lo reciba el mismo diablo, y que sirva para que tengan paz las almas de los honestos.
Cuando se conoció la noticia estaba en la Facultad. Notablemente para todo el mundo fue un motivo de alegría. Que jodido haber vivido así.
En el trasfondo de muchos que sienten alegría hay también una secreta envidia.
En la cultura argentina (aunque no sólo argentina) el poder es una patología. Por eso tenemos tantos casos en la política y en el sindicalismo de tipos que salen directamente del sillón para ir al cajón.
La terapia adecuada para esa enfermedad es la fortaleza institucional con sus mecanismos de contrapesos y recambios periódicos.
¿Pero quién se anima a ponerle el cascabel al gato?
Un mafioso menos. A celebrar.
¿Vieron como de golpe los periodistas lo encuentran un buen tipo que algo hizo? Igual que cuando se fué el tuerto.
¿Vieron como de golpe los periodistas lo encuentran un buen tipo que algo hizo? Igual que cuando se fué el tuerto.
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