Beatriz Sarlo es, para bien o para mal, una de las intelectuales más destacadas que nos va quedando. O por lo menos, de las intelectuales que más se oyen y que se animan a opinar sobre la actualidad negra del kirchnerato. Pero muchas veces pifia feo.
Ayer la escuché hablando de lo que va a dejar el kirchnerismo al derrumbarse, y la tipa mostraba su mayor preocupación por lo que llamó los "restos materiales", esto es los monumentos, las placas, el nombre de los edificios... todas pavadas que se pueden sacar de circulación en una semana, con voluntad, pintura, amoladora o en caso extremo, unos kilos de explosivo.
No pareció estar preocupada por los restos intangibles que van a quedar: la fractura en la sociedad, los millones de mantenidos (planeros, jubilados sin aportes, etc), el enmarañado de subsidios, controles, y cortapisas a la actividad económica, y una generación con la cabeza quemada por la propaganda.
7 comentarios:
A veces tengo la sensación que Sarlo no es kirchnerista más por razones estéticas que éticas o ideológicas.
Cualquier cosa que diga da lo mismo.
Esta señora está del otro lado del mostrador.
Del lado de los perdedores del progreso en la historia.
BB, cada vez que Sarlo abre la boca para algo que tenga que ver con la economía, aunque sea tangencialmente, la pifia feo.
Ella sigue reivindicando el "progresismo" como ideal de sistema de valores, pero como no es una persona totalmente autoritaria sino "buenista" bien intencionada y creo que honesta, condena a los K por sus latrocinios, sus avances sobre la prensa y contra la Justicia, etc., etc.
Es muy bueno que una intelectual bien conocida por su trayectoria literaria y por su militancia "progre" efectúe estas críticas porque le llega a gente honrada de su público "buenista" y tiene más poder de convencer que si lo dijera un radical o un conocido peruca o semejantes.
probablemente los mierdas la hayan ninguneado, dejándola fuera de carta abierta o algo así
No creo que le hubiera interesado, es mucho más lúcida que los pseudo intelectuales de Carta Abierta. Y lo más importante es el reconocimiento de sus errores.
(Esto lo empecé a escribir a la tarde, lo tuve que dejar y ahora recién leí los buenos comments, lo redondeo un poco y ahí va)
A esta altura, yo me pongo a leer a la Sarlo si es que estoy en una sala de espera sin tener otra cosa que hacer y de casualidad me la encuentro en alguna revista tirada en la mesita ratona.
Típica e icónica progre de estas Pampas, con mucho halo de “estar más allá” a través de inteligentes construcciones discursivas pero que no sabe explicar, porque nunca la entendió a fondo, la cuestión última del peronismo. Un punto donde mucha progresía que no se siente peronista, derrapa. Un punto crucial pero invisible para ella, porque es en donde su muy estudiado y seguramente amado Marx no puede sino vinculárselo con éste y con todo tipo de totalitarismo, un lugar ideológico donde la igualdad es mal entendida y trae trágicas consecuencias para la libertad y el bienestar de las personas.
Sin ese entendimiento a mi entender primordial, todo su edificio intelectual al momento de analizar nuestra realidad se derrumba y por eso, por no entrar en contradicción, sólo le queda quejarse de la cáscara maloliente que dejan tras de sí los peronchorros grasas y megalómanos. Y por supuesto que sólo con eso no basta, ni sirve como análisis profundo y renovador.
Conozco personalmente a varias personas que piensan así; se los escucha furibundamente anti-oficialistas y bien hablados, pero si uno escarba un poco se descubre que sus horrores tienen más que ver con las formas que con el fondo.
Sarlo. Una mujer con pasado goriloide. "Progre". Que sin dudas voto a de la rua. Hoy presa facil del estigma al cual le teme von terror. A todo esto sumale una precariedad importante y desesperante al momento de expresarse. Su inteligencia le alcanza justo para comprobar lo parda que es. Dramatico. Ah. Experta en FEIS y chuider. Esa nada es Sarlo
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