Si hay un tema de historia contemporánea que ha hecho correr ríos de tinta, ese es el estudio de la Revolución Industrial. Aunque ahora, con una visión culposa posmoderna aparecen historiadores británicos que dicen que lo que ocurrió en UK no fue tan diferente de lo que estaba pasando en el resto de Europa, es innegable que para que las cosas se dieran como se dieron hacía falta no solo un lote de gente extraordinariamente creativa en lo mecánico, tremendamente deseosa de progreso económico pero además recursos suficientes. Por entonces, agua, hierro y carbón.
Y resulta que hoy, 18 de diciembre de 2015, cerró la última mina de carbón inglesa.
Esto, sin duda alguna, es bastante más trascendente en términos históricos que las nimiedades que cada dos por tres se anuncian como el fin de una era. Vale la pena poner en perspectiva que mientras esto sucede el finado gobierno kakista quiso volver a crear una empresa estatal carbonífera.
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2 comentarios:
Entonces ahora deben cerrar todas las minas de carbón.
En el último párrafo donde dice "sucede el finado gobierno kakista quiso volver a crear una empresa estatal carbonífera" hay que agregar "en un sitio que está probado que no hay carbon suficiente ni de buena calidad"
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