Mañana se cumplen 100 años del inicio de la Tercera Batalla de Ypres, o batalla de Passchendaele.
Para conmemorarla, en Trafalgar Square se levantó en barro del propio campo de batalla la estatua de un infante, bañada permanentemente por una lluvia artificial. A la vez de repetir el terrible barro de Bélgica, presenta una hermosa parábola sobre el olvido.
Es brillante la idea de la estatua de barro. Hace tomar conciencia de cuántos cientos de miles de hombres terminaron disolviéndose en el barro sin siquiera tener una sepultura digna en esa espantosa guerra.
2 comentarios:
cien años atrás. Casi a nadie le interesa lo que pasó hace dos años.
Es brillante la idea de la estatua de barro. Hace tomar conciencia de cuántos cientos de miles de hombres terminaron disolviéndose en el barro sin siquiera tener una sepultura digna en esa espantosa guerra.
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