Bolivia pudo haber sido un gran país. De hecho, antes de la independencia era la única fuente de ingresos para el Virreynato del Río de la Plata, muchas ciudades argentinas crecieron en el camino que la unía al puerto de salida de su producción: Buenos Aires.
Hay muchas causas para su fracaso. Probablemente la autocompasión por la amputación de la salida al mar en la guerra del Pacífico (1879-1884) tenga un rol importante, pero también es fundante en el fracaso del país la aplicación sistemática de políticas estatistas y socializantes que aunque vienen aplicándose en Bolivia desde hace más de 50 añossiguen entendiéndose como el único camino posible para cambiar el inexorable rumbo de colisión con la historia.
José Brechner, un analista que en algún momento fue diputado en el Congreso Boliviano dice:
"En 1952, el Movimiento Nacionalista Revolucionario, creyendo que iba a liberar a las masas oprimidas del poder feudal y la oligarquía minera, decretó la Nacionalización de las Minas, la Reforma Agraria y el Voto Universal.
Hoy, 53 años más tarde, -después de que las medidas revolucionarias del MNR fracasaron, creando un estado dependiente, empobrecido, despótico, corrupto, dueño de todas las riquezas naturales, controlador de la mayoría de los empleos y de los negocios importantes-; existe la tendencia por parte de casi todos los nuevos aspirantes a políticos, de volver al capitalismo de estado, a la economía mixta o, imponer un régimen socialista absolutista de corte castrista.
La Nacionalización de las Minas hundió a la nación entera, creando puestos de trabajo ficticios para alimentar a miles de mineros subsidiados por el estado que ni siquiera estaban dentro de los socavones. Cuando la poderosa Corporación Minera de Bolivia que sobrevivió quebrada, cerró sus oficinas, contaba con más de 60.000 empleados. La Reforma Agraria dio como resultado un campesinado pobre y primitivo con mini parcelas para cultivar, que se subdividieron familiarmente hasta quedar con prácticamente nada. El democrático Voto Universal ha degenerado en el caudillismo barbárico con analfabetos en el poder promoviendo un populismo irracional y la consecuente fragmentación partidaria."
Hoy, 53 años más tarde, -después de que las medidas revolucionarias del MNR fracasaron, creando un estado dependiente, empobrecido, despótico, corrupto, dueño de todas las riquezas naturales, controlador de la mayoría de los empleos y de los negocios importantes-; existe la tendencia por parte de casi todos los nuevos aspirantes a políticos, de volver al capitalismo de estado, a la economía mixta o, imponer un régimen socialista absolutista de corte castrista.
La Nacionalización de las Minas hundió a la nación entera, creando puestos de trabajo ficticios para alimentar a miles de mineros subsidiados por el estado que ni siquiera estaban dentro de los socavones. Cuando la poderosa Corporación Minera de Bolivia que sobrevivió quebrada, cerró sus oficinas, contaba con más de 60.000 empleados. La Reforma Agraria dio como resultado un campesinado pobre y primitivo con mini parcelas para cultivar, que se subdividieron familiarmente hasta quedar con prácticamente nada. El democrático Voto Universal ha degenerado en el caudillismo barbárico con analfabetos en el poder promoviendo un populismo irracional y la consecuente fragmentación partidaria."
En cierto sentido Bolivia es una versión potenciada de lo que sucede en casi toda latinoamérica, y especialmente de lo que pasa más abajo de La Quiaca. Muchas de las causas del fracaso de Proyecto-Bolivia, se asemeja a las de fracaso argentino. Vale la pena, por eso, ver completo el artículo de Brechner, publicado por El Iberoamericano.
argenblogs
2 comentarios:
Pobre Bolivia, pobre argentina, Pobre Hispanoamérica
shl
esa, con algunos matices por país, es la historia de toda la región... no aprendemos más.
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