28 de octubre de 2005

Keynesiano, con K de Kirchner

Pasadas las elecciones, el Néstor se enfrenta nuevamente a la necesidad de gobernar, algo que había quedado relegado por la necesidad de cumplir una agenda electoral que lo llevó a repartir fondos públicos por todo el país, en forma de promesas de obras, y según algunas malas lenguas de otras manera menos edificantes pero más propias del sistema de lealtades de la política argentina.
Entonces, salió a anunciar que se licitará la construcción de dos centrales eléctricas diciendo que en materia económica la “Argentina debe tener una visión keynesiana y heterodoxa”.
Tan heterodoxa que justamente las nuevas centrales se pagarán con deuda. O sea que los inversores no ponen el dinero por buena voluntad, sino que entran en una sociedad a las que los ha conminado a participar De Vido, en las que las acreencias que tienen con el Estado se convierten manu militari en el capital de la nueva sociedad mixta.
Mas que heterodoxia eso es apriete extorsivo lisa y llano. Y muestra que la celebrada “inversión” no es mas que otro manejo crápula de la deuda.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Y LOS EMPRESARIOS EN VEZ DE PATALEAR ACEPTAN Y SON COMPLICES!!

Louis Cyphre dijo...

Rubén, todo esto ya lo vimos tantas veces en la Argentina que no nos debería llamar la atención; es lo mismo de siempre.