La recordación de los 12 años del atentado a la AMIA ha puesto en un brete a la Nueva Historia Oficial. El titular de la Mutual acaba de reclamar que la justicia declare el ataque como un crimen de lesa humanidad, para que de acuerdo a lo que dictaminó la Corte Suprema, se transforme en imprescriptible.
Y es lógico, la imprescriptibilidad es la única manera de mantener una esperanza de que alguna vez se llegue a algún resultado con una causa que más que estancada, se hundió en una ciénaga de teje-manejes políticos, operaciones de inteligencia berreta, y manoseos partidistas.
El atentado de la AMIA, fue evidentemente, un ataque terrorista. Está probada la participación de Hezbolláh. Pero resulta que la Argentina no tiene una definición oficial para "terrorismo". Y considerar que los hechos terroristas también son crímenes de lesa humanidad abriría la posibilidad de procesar a los responsables de los atentados terroristas de los setenta, que justamente, son los guionistas de la Nueva Historia Oficial. Por otro lado, el mantenrse al margen de una condena oficial al terrorismo no es precisamente lo más beneficioso ni para el país ni para el gobierno, justo en un momento donde se redefine el "Eje del Mal".
Ver cómo va a hacer el Néstor para cuerpear este reclamo va a ser para alquilar balcones. Dudo que su pericia municipal le sirva esta vez.
3 comentarios:
Lo grave del asunto es que Argentina, o su gobierno, hoy están más cerca del terrorismo que de las democracias.
Gracias por ocuparte del aniversario del atentado a AMIA.
Podrían hacerle un retoque -otro más- a la historia oficial y decir que se trató de un gran escape de gas del cual fue responsable una empresa privada financiada por un fondo buitre estadounidense. Serviría también de excusa para reestatizar ese servicio.
En la Argentina manda Irán, vía Chávez.
¿Está todo dicho?
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