Despacito, despacito, se va corriendo el velo sobre la megacorrupción instalada por el gobierno K.
Desde que llegó al poder, la banda santacruceña obliga a todos las empresas de servicios públicos a administrar contratos de ampliaciones, mejoramientos, o mantenimiento que no licitan privadamente sino que adjudica el omnipresente Ministerio de Planificación Federal. Los precios a los que se han adjudicado han sido siempre lapiceados desde el propio organismo que supuestamente debería ejercer el control, y como la dependencia que supuestamente controlaría al Ministerio está en manos de la mujer del ministro, está todo el ciclo cerrado.
La sueca Skanska es la primer empresa que pisa el palito, y ya le encontraron pagos fantasma por apenas tres palos verdes.
En otras épocas con un hallazgo similar arderían todas las radios con comentarios de Majul, Lanata, Tenembaum, Slotonosecuanto... Página se haría una fiesta con el gasoducto que hizo gas seis millones de pesos. Ahora nada. La corrupción si es nacional y popular parece que no tiene sanción.
7 comentarios:
Rubèn, Lanata escribiò un buen artìculo sobre los negocios corruptos que se estàn mandando con los bolivarinos. Muy interesante.
Seguramente mañana TN saque esto en URGENTE...què hipòcritas!
Iván,
Por esa investigación Lanata va a ser tildado como reaccionario y funcional a la derecha, la Iglesia y las FFAA con toda seguridad.
Habrá que ponerle unos microfonos a Mr. de Vido......a lo mejor nos enteramos que los ministros de Menem eran de la orden de Teresa de Calcuta....
¿Quien se anima?
Señores, ustedes son unos reaccionarios, seguramente agentes pagos del menemismo, las multinacionales, los ganaderos, la derecha golpista y demás noventistas que apuestan permanentemente al fracaso del modelo Nacional, Popular y Progresista de Kirchner y sus revolucionarios.
Les explico. La corrupción es propia del capitalismo salvaje y comeobreros. Nosotros los progresistas no somos corruptos, porque el socialismo nacionalista latinoamericano es puro de alma, puesto en práctica y conducido por personas de un corazón de oro. Eso de que el grado de corrupción es directamente proporcional a la discrecionalidad con que se manejan las cuestiones de estado es un invento de la derecha.
Espero que les quede claro de una vez.
Te felicito, Luis, pero me robaste el discurso.
eeehhh, errr....
la ironía no es lo tuyo, anónimo,no?
Ah, no claro. Para eso hace faltaalguna neurona.
Lo increible es que estas empresas después tienen que documentar el gasto en coimas de alguna forma, y las termina enganchando la DGI por usar facturas truchas para evadir impuestos.
Pero muchos casos de evasión son en realidad casos de corrupción encubierta.
Muchísimos proveedores del Estado usan facturas truchas y sin embargo siguen operando. ¿Por qué? Porque esas facturas ocultan los pagos a los funcionarios que las protegen y les conceden negocios por izquierda.
Lamentablemente, la prensa no parece tener el mismo impulso para ocuparse de estas cosas que en los tiempos de Carlos Saúl, pero si buscan yo creo que la cosa está mucho peor que entonces.
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