La actual administración, con su monumental maraña de subsidios que no para de crecer, genera justamente ahorros a quienes consumen lo que se subvenciona. Si se eliminaran de un solo golpe esos gastos deberían actualizase valores desde la leche hasta las tarifas aéreas, pasando por el boleto de colectivo. En términos muy globales, empresas y particulares deberían asumir gastos iguales al superávit primario del Estado.
¿Qué diría el ministro de economía si le pidiéramos que nos explique lo que va a hacer con esta maraña de subsidios? Arriesgo una respuesta:
Ah, no sé. Cuando llegué yo ya estaban...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario