2 de agosto de 2008

Monitor electrónico




El sistema de monitoreo electrónico es en principio degradante, porque es una moderna forma de cadena con bola de hierro.
En algún momento el Consejo de Europa lo consideró violatorio de derechos humanos.
Como es mucho más barato que tener a alguien en una celda, el problema es que puede extenderse hasta que todos seamos monitoreados en una especie de sociedad-cárcel.
Puede llegar a ser una pesadilla.
Pero por otra parte, en América Latina, donde el 70 por ciento de los presos son preventivos (sin condena) y en prisiones cautelares larguísimas, en cárceles atroces, en algunas de las cuales se duerme parado o se han comido todos los gatos y perros y se contagian el HIV y otras cosas y se matan a puntazos, los mismos presos suelen reclamarlo.
¿Cómo decirles que es violatorio de derechos humanos en ese caso?
¿Cómo explicarles que es muy peligroso como instrumento de potencial control político de los que hoy estamos sueltos?


Dicho por Eugenio Zaffaroni, en Crítica de la Argentina.

¿No era que el problema correspondía a otro Poder?

En realidad, el problema es más sencillo: no funciona.

2 comentarios:

parcass dijo...

Raquel:

Y, si la loca tiene razon el problema es de Zaffa.
Asi como intiman al ejecutivo para arreglar el riachuelo, porque no lo hacen con las carceles?

Europa?.Si estan a favor de los islamicos.Que podes esperar.

Yo no tendria ningun problema con el monitoreo.Alguna vez hay que terminar con los DDHH de los chorros.
Pero ojo, de todo criminal.Si tenes plata no pasas muchas penurias con tu pena.Y con un juez accesible (muy comun)arreglas,al juez,al fiscal,al meritorio,al portero y al kioskero que esta prendido(plagiado a Todos Gronchos).

La poblacion carcelaria se soluciona facil:toda pena de 6 anos o mas;condena de muerte.

Y de Zaffa...mejor no hablo...me van a decir fascista.

Julio Rougès dijo...

El monitoreo electr�nico es espantoso si se lo compara con la libertad, pero como sustituto de la c�rcel resulta una restricci�n menor de aqu�lla. Parto de la base que s�lo se colocan esos instrumentos a personas que, de otra manera, estar�an encarceladas, y, siendo as� me parece una buena alternativa, que compatibiliza de alguna manera la libertad ambulatoria �con alguna restricci�n- y el inter�s p�blico de evitar que un condenado o procesado con prisi�n preventiva delincao o huya del pa�s.

La principal raz�n por la que los europeos y Zaffaroni son tan opuestos al monitoreo, como si fuera una herramienta orwelliana, es porque constituye una herramienta �capitalista� empleada en los Estados Unidos. En Argentina, al pensamiento progre no le parece violatorio de las garant�as constitucionales que se mande a c�rceles comunes a militares o curas septuagenarios y octogenarios �despu�s de haberlos juzgado sin considerar ninguna de sus defensas,y en violaci�n del art. 33 de la ley 24.660- pero se espantan con el monitoreo electr�nico de procesados con prisi�n preventiva o condenados.

La mejor forma de evaluar las alternativas ser�a otorgar a los presos el derecho de optar, no subrogarnos en su libertad y en su voluntad, opinando sobre una herramienta que, en definitiva, constituye un mal menor.

Por supuesto que tanto la c�rcel como cualquier forma de restricci�n o control de la libertad ambulatoria son males necesarios, no bienes. Es un avance del Estado sobre la libertad, pero que se justifica excepcionalmente �como todo el derecho penal- cuando el individuo ha lesionado previamente bienes jur�dicos considerados tan importantes, que justifican su encarcelamiento. Y si se admite guardar a una persona entre cuatro paredes, tambi�n debe serlo colocarle una pulsera o tobillera electr�nica. Si le preguntan a los reclusos qu� prefieren, no tengo dudas de cu�l ser� la respuesta de la inmensa mayor�a.