Clip de fin de semana

Otra vez me atrevo a compartir algo con mis cobloggers. En este caso, se trata de una balada de la hostia, que conocí cuando era muy chico. Mi adorada hermana se había conseguido un casette (¡!) de The Stranger, y lo pasaba una y otra y otra y otra vez. 

En su momento tanta repetición me aburrió, pero debo reconocer que gracias a ella conocí (y decubrí años después) uno de los mejores músicos a la hora de contar historias y componer baladas. 

Así que, amigos, si les apetece, busquen a bottle of white, a bottle of red, perhaps a bottle of rose instead, y disfrútenlo. El ñato la toca con toda la garra en el mítico Yankee Stadium, en un concierto para coleccionar.