Rosario lleva meses y meses bajo el humo. No hay helicópteros, aviones hidrantes, ni notas de la prensa nacional. Como ya no hay rédito en echarle la culpa a algún enemigo del gobierno, no hay funcionario que se haga cargo del asunto. Una diputada provincial viene pidiendo que la Picolotti y su dependencia intervenga en forma inmediata.
Hoy una ONG rosarina denunció al municipio entreriano de Victoria ante la justicia federal.
Mientras esperamos los aviones bomberos que tardan más que el general Alais, seguimos con la antigua receta: ajo y agua.
3 comentarios:
¿el ajo es ignífugo?
No, raptor. Se quema.
Y el gato también
No soñes con los aviones hidrantes, sino los mandaron cuando los incendios en las islas entrerrianas durante el conflicto con el campo. Menos los van mandar para cumplir con un municipio que esta en las antipodas del Gobierno Nacional,
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