Me pregunto qué favor le estamos haciendo a nuestros niños y niñas, alentándolos a creer en seres mágicos que otorgan regalos a cambio de casi nada, tal como lo hicieran con nosotros nuestros padres.
Qué influencia puede tener ésto en la edad adulta, si podemos comprobar que hay tanta cantidad de ciudadanos votantes bienpensantes dispuestos a creer que algún líder iluminado les va a dar bienes a cambio de nada, a conceder privilegios (mal llamados "derechos") sin corresponderles responsabilidad alguna?
11 comentarios:
Iba a preguntar si alguno más no pudo entender que me refiero a los regalos a los chicos comunes (no a los que tradicionalmente recibió Jesús).
Pero casi no hace falta: aunque Carlos C. oculta su perfil, lo identifiqué por usufructuar la Gadsden...
Porque casualmente el post original iba a decir "peronchos" en vez de "ciudadanos" pero por error lo suavicé:
...tanta cantidad de peronchos dispuestos a creer...
Sabia reflexión,
y a propósito de la confusión de derechos y privilegios transcribo palabras atribuídas a la madre del Mahatma Gandhi:
"A los derechos se accede a partir de los deberes previamente bien cumplidos".
La cita de la madre de Gandhi contrasta notablemente con las palabras a su vez atribuídas a Evita:
"La necesidad crea derechos"
Y permite confirmar lo certero de las aclaraciones de Klausbert.
Donde hay una necesidad hay un político!!!
Con sólo pensar que no eran reyes, y ni siquiera tres...
En fin, el populismo no conoce límites.
Piko!
che, desalmados, ustedes no quieren a nadie!
En un fútil intento de reencauzar el post, reformulo y resumo la pregunta. Incluyan a Papá Noel, le puse Reyes porque se me ocurrió anoche recién.
Creen que hay relación entre hacerles/nos creer en la infancia que seres mágicos todopoderosos nos darán algo a cambio de nada, y el esperar de adultos que algún líder nos colme de riquezas sin haber trabajado para generarlas?
Sí o no?
Klausbert, sè que un caso aislado no sirve, pero en mi caso y en el de muchos familiares cercanos, no hubo relaciòn.
Para mì las figuras de Papâ Noel y los Reyes Magos son un hermoso recuerdo de mi infancia, y no olvidarè nunca la ilusiòn conque esperàbamos esas fechas.
Pero eso no nos hizo dejar de lado la cultura del esfuerzo personal y del trabajo para lograr nuestras metas en la vida, sin esperar regalos de nadie.
Creo que la cosa pasa por otro lado.
Klausbert, coincido con Raúl. Sin ir más lejos, muchas sociedades prósperas alentaron -y alientan- tales íconos, sin crear ciudadanos ávidos de populismo y prebendas.
Ahora, lo de los peronchos es otra cosa muuuy distinta. Creo que la raíz está por otro lado. Todavía no pude sintetizarla, pero estoy casi seguro que pasa por otro lado.
Gandhi era un flor de socialista.
Psicológicamente hablando, las fantasías de la niñez son necesarias y hasta sanas, y es saludable que los padres las estimulen.
Después, con el tiempo, el niño debe ir madurando para adaptarse a la realidad.
Los que creen que Melchor, Gaspar y Barack les van a dar todo a cambio de pasto son gente que no han madurado y adquirido el sentido de la realidad y responsabilidad.
Además, es sumamente agradable y satisfactorio ver la felicidad de los chicos a las 00:00, sacando de lado la metáfora, que me pareció muy interesante, me parece razón suficiente para seguir con la tradición.
Pero como todo, después hay que MADURAR, cosa que muchos no hacen, proque en vez de independizarse de sus padres, solamente los reemplazan con otro padre-dador-quitador de todo.
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