17 de abril de 2009
Sepa el pueblo votar
Leo que por culpa del pacto de Olivos la elección se define en el conurbano. ¿Una elección legislativa?
En una elección presidencial, un voto de un plan trabajar de la matanza vale lo mismo que un voto de un capitán de la industria, de un narco de la villa 1-11-14, de un terrateniente de familia patricia, de un obrero que trabaja en el norte del gran buenos aires, pero vive en el sur, y tiene que tomarse un micro a la estación, un tren a Constitución, el subte a Retiro, y de ahí otro tren, y un ómnibus hasta la fábrica. Antes no era así, por el colegio electoral, que estaba formado por el doble de la suma de diputados y senadores de cada provincia, y las provincias con más peso eran La Rjoja, Santa Cruz, La Pampa, Catamarca, San Luis (todas provincias gorilas, por otro lado).
Por qué?
En una elección legislativa no vale un hombre un voto (ver aquí). El voto del cabeza del conurbano (y el del dueño de la mansión de San Isidro) vale mucho menos. Y todo gracias a la ley inconstitucional del proceso que fijó la cantidad de diputados por provincia para las elecciones de 1983.
Aunque en las últimas elecciones presidenciales me haya dado vuelta en el último segundo, siempre respeté la idea central de este post, que ya repetiré más cerca de la fecha de las elecciones: No le busque el pelo al huevo.
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4 comentarios:
Excelentes posts.
Excelente y muy ilustrativo.
Tres viejos diseños de la campaña presidencial de 2007
Coincido totalmente, y pienso que lo peor que se puede hacer es votar en blanco o no ir a votar.
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