Ulla Schmidt tuvo mala suerte.
Le robaron el coche cuando se encontraba de vacaciones en Denia, ciudad de la costa valenciana, en España.
El coche fue recuperado posteriormente.
Pero el problema es que Ulla Shmidt es la Ministra alemana de Sanidad y el coche sustraído es el oficial.
Cuando se conoció la noticia del robo muchos se preguntaron qué hacía la ministra germana utilizando el coche oficial a más de 2000 kilómetros de su país para sus propias y personales vacaciones.
El escándalo le está costando a la Sra. Shmidt su posición privilegiada en el partido socialista y quien sabe si en el futuro su mismo puesto ministerial.
Viene bien conocer esta noticia frente a los usos y abusos de los medios de transporte oficiales por parte de personajes del gobierno argentino durante la pasada campaña electoral.
Muchos usan estas noticias para justificarse diciendo que este tipo de cosas pasa en cualquier país del mundo. La diferencia es que en algunos países cuando se descubre el hecho se perjudica gravemente el responsable. Mientras que en Argentina no sólo no se escandaliza nadie sino que el responsable queda como el más piola de todos.
1 comentario:
Robarle a todos es como no robarle a nadie.
Y a quién no le gustaría poder hacerlo?
La diferencia es la sanción, o la ausencia de la misma.
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