Quienes, por manía de concebir la política en términos de opresores y oprimidos, imaginen tanques en las calles de Tegucigalpa arriados desde los cuarteles por un jefe militar omnímodo, o gentes amedrentadas en sus casas, masacradas en las calles o fugitivas en los bosques, están equivocados.
También lo están quienes creyesen a pies juntillas la versión de un asalto al poder legal y prístino, pues no lo hay, si el presidente elegido por voto popular fue desalojado en virtud de una orden de la Corte Suprema, y el poder vacante resultó entregado al titular del Parlamento, no a un jefe castrense.
¿Sabe alguien, entonces, la verdad de lo que está pasando en Honduras?
En todo caso, no es seguro que nuestra mandataria conozca la trama secreta de lo que allí se teje.
Imagina en Honduras una prueba piloto, un ensayo general de derrocamiento que, si tiene éxito, se volvería preliminar de otros en la región.
La Nueva Provincia
Bueno, seguramente no es la única razón que impulsa a la infame incombustible a participar en esos deplorables y tan penosos eventos, pero no deja de ser interesante imaginar que en un futuro próximo los presidentes 'elegidos por el voto popular' sientan que ellos también tienen que cumplir con las leyes, y que en ningún caso están por encima de ellas.
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2 comentarios:
Creo que la sobreactuación de Barbie es precisamente porque siente que lo de Zelaya puede ser el primer caso de una nueva ola de respeto estricto de la constitución, que de aplicarse acá se la lleva
También contá como motivos para tanta sobreactuación la necesidad de tapar con "presencia internacional" (ajjj) el desastre que es la Argentina (inseguridad, pobreza, crisis económica, epidemias...) y la derrota electoral del Kirchnerismo... HELP!!!
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