Recién llego de un viaje de 12 horas Ros-Bue-Ros.
A partir de Maschwitz, hacia la General Paz, se veían pintadas muy prolijas -evidentemente contratadas- apoyando la intervención estatal en el fútbol.
"Ahora el fútbol para todos" era el mas repetido, aunque no faltaba algún"Chau Clarín, el fútbol es de todos", mensaje en sospechosa sintonía con el discurso del virolo abyecto.
Cuando volvía, escuché por radio al lenguaraz Caníbal Fernández y al vicepresidente de la AFA, explicando que no se trata del fútbol sino del fomento social que significan miles de clubes y ligas (que no ven ni un mango de la TV), de los merenderos que tienen en los clubes barriales, y de preservar a miles de jugadores que emigran porque acá no se les paga lo que se debería (como si millones de trabajadores y profesionales cobraramos lo mismo que en Europa o USA).
En algún momento salió una frase inesperada :"el estado no va a poner un centavo".
¿Y si el tuerto se fue de boca? ¿Y si la rescición con TSC fue antes de verificar que hubiera caja? ¿Y si la suspensión del tarifazo en luz y gas los dejó sin un cobre? ¿Y si las encuestas le mostraron que la gente no acompaña que 6000 palos vayan a financiar al fútbol?
difícil, pero no imposible a la luz de otras metidas de gamba que han hecho, que demuestran que vienen sin libreto hace rato e improvisando sobre la marcha. Sería muy gracioso que terminen poniendose en contra a los que quisieron seducir con este show.
1 comentario:
Ah, wishful thinking...
pero me despierto y veo que ese asco es real...
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