21 de agosto de 2009

Un mamarracho de senadora


La senadora Quintela es autora del proyecto de ley de alquileres. No sabe qué es un precio, imagina que la ley de la oferta y la demanda se puede derogar. Escuchen la entrevista y vean en manos de quienes estamos.

José Benegas

No se pierdan esta entrevista. Si pueden abstraerse del hecho que se trata de una senadora de nuestra nación, hasta podrán llorar de risa.

(Si no logran abstraerse querrán ahorcarla, creo)

25 comentarios:

Pablito dijo...

¿Que habra tenido que hacer en el partido esta señora para que la hayan ubicado en la lista de candidatos a senadores?.

Con esto queda claro que el peronismo es un movimiento de promoción - mas que de la mediocridad - de la marginalidad intelectual.

Esta pobre mujer es una infradotada que ni siquiera sabe exponer lo que le mandaron a proponer.

Hegeliano dijo...

Io no acepto chicanas.

son demasiado dinero lo que han ganado en los ultimos años.

las viviendas no estan en función de gobierno y no estan en funciones de estado

proiecto de ley

todo eso los ciudadanos somos los responsables, podemos o no podemos compartir.

monopolios en todo en todo.


Es una mezcla de mama cora con menem y catita.

Carlos dijo...

¡Qué vergüenza!

Vladtepes dijo...

Un claro subproducto del "inbreeding" de las famosas siestas de los pueblos chicos del interior

Bugman dijo...

Cómo será la laguna, que el chancho la cruza al trote.
Aparentemente, los mismos senadores oficialistas le pararon el proyecto.

Victor dijo...

Lo escuché mas temprano... ya nada me sorprende.

Te digo, hasta en algunos momentos me enterneció la vieja, vergüenza ajena me daba, por su analfabetismo.

Es INCREÍBLE el nivel de gente que llega a esos puestos tan importantes colgados de una boleta de algun capanga. Que desastre. Por lo menos que se quede callada!

Mariano Iraola dijo...

Las bondades del cupo femenino.

General Cangallo dijo...

Bugman, su comentario me hizo acordar a "Coleccionista de tangos", aquella célebre pieza de Tangalanga en la que llama a un experto en música ciudadana para pedirle que le consiga el tango "Como será la barranca, si el sapo la sube de rodillas". Más de una vez lloré de risa al escucharlo.

Martín Benegas dijo...

A alguien le queda alguna duda de que estamos en el horno?

Cogito Argentum dijo...

"yo soy peronista"
"si, si, seguro"

vieja lela

Un maestro este Jose, la apreto sin que se enoje (aunque no se si la vieja entendia el sentido de las preguntas)

Anónimo dijo...

No Cogito, lo peor es eso, la vieja era una simplona total. No tenía ninguna maldad. Vos a una persona así le decis "o sea que usted imagina la necesidad de la ley antes de observar datos reales y despues pide a expertos que encuentren evidencia que sostenga lo que usted dice" y te va a contestar que sí sin problema. Esta mujer tiene una capacidad intelectual como para hacer tortafritas, no más que eso (y no creo que le salgan dos iguales).

Anónimo dijo...

Minas como esta evidentemente son soldaditos del peronismo, relleno, estarán ahí porque no traicionan la causa ni aunque los frían en aceite hirviendo (porque jamas se les va a caer una idea). Lo apabullante es que haya jugadores de ese nivel dentro del senado. Lo intelectualmente pobre que tiene que ser la provincia para que no haya ni uno más avispado que le haya madrugado el puesto.

@PaloMedrano dijo...

Alberdi
Sarmiento
Lugones
Borges
Bioy
Marcelo T.
Newbery
Houssay
Leloir
Fangio
Favaloro
etc



Maradona
Cristina
Teresita Quintela
etc



Nos tapó el agua.

Cogito Argentum dijo...

mas que agua parece diarrea

Julio Rougès dijo...

Más allá de los errores de esta senadora, la mayoría de los comentarios tienen un retintín de porteño canchero, despectivo de esa "cabecita negra" riojana. Si como liberal deploro sus gruesos errores sobre la oferta y la demanda (no inferiores y más excusables que las de zurdoides con aires de intelectuales y correcta o mejor dicción) como provinciano me molesto por la minusvaloración del "interior" (¿Buenos Aires pertenece al exterior?) subyacente en algunos de los posts:
1) Vladtepes: "un claro subproducto del "inbreeding" de las famosas siestas de los pueblos chicos del interior". Post al post: la endogamia es más probable que se dé en los pueblos chicos que en los grandes aglomerados urbanos; en éstos hay más putos y pervertidos. La referencia peyorativa a las "famosas siestas" de los pueblos chicos del "interior" es una generalización porteña de la laya de un lugar común. Roca y Avellaneda provenían de lo que en aquella época eran caseríos de Tucumán, lo mismo que Marcos Paz –otro tucumano- quien siendo vicepresidente, sufrió la muerte de un hijo en la guerra contra Paraguay. Sarmiento (otra figura que perdió a un hijo en aquella confrontación) nació en una casita sanjuanina al lado de una parra; Urquiza era un caudillo entrerriano. Victorino de la Plaza nació en Cachi, minúsculo pueblito de Salta a 3.000 metros sobre el nivel del mar. No quiero abundar en detalles sobre la historia argentina, pero la peste "progre" que se ha abatido sobre la educación y cultura argentina tiene por principales agentes de transmisión a porteños que -con mejor o peor dicción- hablan castellano con acento italiano.

Julio Rougès dijo...

2) Víctor: si seriamente te enterneció la “vieja” y no es una "boutade" irónica, me alegro que tengas ese rasgo de piedad. A mí me pasó lo mismo, y la respeto, aun en sus errores, más que a la mediocridad y maldad pseudo ilustrada que ocupa los cargos claves en el Poder Ejecutivo, el Congreso, el Ministerio Público y en gran parte del Poder Judicial, sobre todo los designados en la época kirchnerista.
3) Max: si “la vieja era una simplona total, no tenía ninguna maldad”, en vez de encarnizarnos y burlarnos de los simplones sin maldad, procuremos enseñar a esa gente, y combatir en serio o los no tan simplones y que con mucha maldad nos alinean en el eje chavista. Más peligrosos que esa señora son Pino Solanas (que fue votado por muchos porteños rubitos), Verbitsky (quien sin ser votado por nadie digita los nombramientos en el Poder Judicial, o influye en sus decisiones por el temor que infunde), los Kunkel, Conti y compañía; los autores de ese proyecto socialista -y no meramente peronista- de país que estamos viviendo, y los que teniendo responsabilidades políticas, nunca lo critican frontalmente, como Macri; los "intelectuales" de pacotilla kirchneristas enquistados mayoritariamente en algún cargo público, a quienes coquetean los medios de prensa, o se arrugan por temor al sambenito de "derechistas".
4) Nuevamente Max (“Lo intelectualmente pobre que tiene que ser la provincia para que no haya ni uno más avispado que le haya madrugado el puesto"): por favor, no subestimes ni desprecies a las provincias ni a los provincianos. Joaquín V. González era riojano. Menem, con todo lo que pueda criticársele, era en materia de relaciones exteriores claramente pro-norteamericano y pro-occidental (en vez del chavismo gobernante); en materia económica, privatizador, desregulador y público defensor de la economía de mercado; y en lo político, el más tolerante -junto con Illia- que conocí en mi existencia. No se perseguía a la prensa, no se espiaba a los opositores ni a los jueces ni a los empresarios, ni se pinchaban sus teléfonos.
Por lo demás, el nivel intelectual no tiene nada que ver con lo “avispado”, para “madrugar” un puesto. Esa “viveza” argentina se halla presente en muchas nulidades intelectuales y morales. Argentina está llena de “vivos”, y así nos va.

Anónimo dijo...

Julio, hablando de tonitos, usted (ya que ni de vos lo voy a tratar para que no se me ofenda) siempre tiene un aire de superioridad moral arrollador en todos sus comentarios, aburre. Si es tan liberal podría empezar a tratar a los demás de iguales, va más con esa etiqueta.
Ah, viví una buena parte de mi vida en una provincia del norte y trabajo el 100% del tiempo con gente de allá. No se de donde es usted pero la cantidad de prejuicios que mostró en su crítica se me hace casi graciosa. Sufro todos los días el funcionamiento de las políticas de una provincia pobre, clientelista y retrasada, tengo que lidiar con inutiles de esa esfera política y me creo con absoluto derecho a criticar a quien me cante, tengo un mundo bastante más grande que capital federal. Me parece que la pifia, fui claro en que la mujer no es mala, es solo un adoquin sentado en un asiento de senador, y eso me da de sobra para despotricar todo lo que quiera contra ella y el sistema nefasto que la puso ahi. Lo de que nadie le sacó el puesto es una observación práctica, no le veo el error. Viendo que me mide tan mal por favor abstengase de criticas similares en el futuro asi no me obliga a decirle que está equivocado.

Julio Rougès dijo...

Max, puede o puedes tratarme de Ud., de vos o como le o te plazca.

Comienzo por el epígrafe del comentario con la observación de Blogbis: "Difference of opinion leads to enquiry, and enquiry to truth" (Thomas Jefferson)y su sugerencia: "Tratemos de no convertir este espacio en los "Dos Minutos de Odio" de la novela 1984".

No lo convenceré ni perderé el tiempo tratando de hacerlo. Le sugiero que relea lo que escribió, lo que escribí, y si se aburre lo lamento.

Si quiere visitar mi blog "Libertades y Socialismo"(http://juliomvrouges.blogspot.com/) tendrá una idea aproximada de lo que pienso (también en "El opinador compulsivo", http://articulos-interesantes.blogspot.com/). Lamentablemente, no dispongo del tiempo o no tengo la constancia suficiente para mantener mi propio blog permanentemente actualizado, pero al margen de sus falencias, pongo mi nombre y mi apellido, lo que significa asumir plena responsabilidad por lo que digo, en un país en que el Estado puede hacerte mil maldades, la más inocente de ellas perseguirte a través de la AFIP.

Soy de Tucumán, provincia que al igual que otras, dio a Argentina muchas de sus mejores figuras. No tengo pre-juicios contra las personas de ninguna parte, sino juicios y el derecho de expresar mis opiniones, aunque no le gusten, ni le guste mi estilo, ni mi "tonillo". Si eso le parece "casi gracioso", debe tener un sentido del humor que mi irremediable provincianismo no alcanza a captar.

Creo que los senadores no son lo más nefasto en esta tierra de promisión (como diría Raquel). Fue en el Senado que se rechazó la ratificación de la resolución 125, y si no tuviéramos un Congreso bicameral el daño que podría hacer un poder ejecutivo con el acompañamiento de los diputados, sería mucho mayor, por la gran concentración de la población en la Capital Federal y la provincia de Buenos Aires. El partido de La Matanza cuenta con más diputados que la mayoría de las provincias.

Tiene derecho de criticar a quien quiera, incluido naturalmente a mí -yo defiendo en mi blog la libertad, la propiedad, la seguridad jurídica, el libre mercado y critico el intervencionismo estatal- pero no es necesario descalificar a las personas ni a su origen para afirmar una idea.

Si la mujer es un adoquín sentado en un asiento de senador, más grave es que personas con educación universitaria y con una pátina de cultura opinen exactamente lo mismo que ella, o tengan opiniones más extremas, como son quienes nos gobiernan desde el poder ejecutivo, y gran parte del mundillo "artístico", "cultural" e "intelectual".

En cuanto a su sugerencia de que me abstenga de críticas similares en el futuro, "así no me obliga a decirle que está equivocado": ya me lo dijo, sin estar obligado. Tiene todo el derecho del mundo de hacerlo, como yo de opinar lo que me venga en gana (discúlpeme que sea tan aburrido de pensar que es más apropiado que su coloquial "se me cante").

Saludos, y procuremos alguna vez vivir en un país en el que no tenga que lidiar -como dice- con los problemas de una provincia pobre, clientelista y atrasada (yo, además, vivo en una de ellas), ni en una Capital Federal empobrecida, sucia, clientelista, marginalizada, que conserva aún vestigios de su antiguo esplendor, sino de nuevo en la Reina del Plata.

Anónimo dijo...

Julio, yo no fui el que salí a criticar a todos los que opinaron antes. Usted tiene estas salidas doctorales siempre, y cuando a alguien no le gustan se va dando un portazo, es siempre igual.

Julio Rougès dijo...

Perdón, mientras discutimos sobre nimiedades, en Venezuela el gobierno aliado al nuestro da palos y arroja gases lacrimógenos contra la población civil (http://blogbis.blogspot.com/2009/08/en-venezuela-tambien-deberian-ir.html.). También matones pro-gubernamentales han asesinado a muchas personas.

Es el momento de identificar al enemigo, que no es otro que este gobierno kirchnerista nefasto, y evitar que consolide su poder. Todo lo demás es accesorio, incluidas nuestras polémicas por pequeñeces.

Anónimo dijo...

Ah, veo que no se entiende, debi ser más claro y poner "obligarme a decirselo DE NUEVO", pero pensé que se sobreentendía.

Massa dijo...

Julio, si Ud es tan liberal como dice (lo cual me parece perfecto), me interesaria conocer su opinion acerca de unificar las provincias en regiones. Cosa que creo que tiene todo el sentido del mundo...

Se lo pregunto porque con todo respeto, y en base a comentarios que ha hecho a posts acerca del aborto, mas que liberal Ud me parece que es conservador. De nuevo, con todo respeto se lo digo.

Saludos.

Julio Rougès dijo...

Max, efectivamente, no tengo nada que discutir contigo.

Massa, veo que en todo momento debo estar rindiendo examen de liberalismo, pero como sos un examinador educado, te respondo. Además de liberal soy conservador, sí, pero es muy largo de explicar por qué no considero incompatibles ambas cosas; en algún post lo hice. Aunque muchos liberales son abortistas (sobre todo, los más jóvenes), nunca integró ni integra el cuerpo doctrinario del liberalismo esa cuestión. Quizás dentro de 20 años nuevos liberales te tachen de conservador por opinar que el infanticidio de un niño de pocos días es un homicidio mientras los totalitarismos avanzan suprimiendo las libertades esenciales.

La creación de regiones sin facultades políticas si es genuinamente consensuada (como ya lo prevé el artículo 124 de la Constitución), y no dirigida desde el gobierno central me despertaría algunos reparos, pero quizás me tragaría el sapo (Estados Unidos mantiene orgulloso su federalismo, con las 50 estrellas que ondean en su bandera).

Como liberal, prefiero el federalismo pero en serio, no esta fachada, en que las provincias dependen de los aportes del tesoro nacional. Si rigiera un auténtico federalismo fiscal, en que cada provincia recaude sus impuestos directos (que es la regla con excepciones temporales del artículo 75, inciso 2° de la Constitución, y más claramente establecida en el art. 67, inc. 2 de la Constitución de 1853-1860)y concurrentemente con la Nación los impuestos indirectos, se acotaría el clientelismo político, pues cada gobernador sólo podría gastar lo que recaude, y se promovería la competencia fiscal entre las provincias para reducir gastos e impuestos y atraer inversores.
Un esquema centralizado como el actual -con la "copartipación" y los aportes del tesoro nacional- genera incentivos perversos para gastar sin límites y procurar que los recursos provengan del estado nacional; adicionalmente, alienta la sumisión al poder central, y que los candidatos a gobernadores y legisladores provinciales esgriman como argumento electoral su buena relación con la presidencia. Con impuestos y recaudación descentralizados, la presión fiscal sería muy inferior, pues la gente y las empresas "votarían con los pies" y se radicarían en las que cobren menores impuestos y otorguen mayores facilidades.

No olvidemos que las provincias preexistieron a la nación, y que la Constitución se sancionó en cumplimiento de pactos preexistentes entre las provincias.

Los esquemas centralistas fomentan el autoritarismo político y el intervencionismo estatal en la economía, en la educación y en la cultura, pues sólo se concibe una "planificación" a nivel nacional, si las provincias o regiones carecen -de hecho- de potestades para darse efectivamente sus propias instituciones.

La regla del artículo 104 de la Constitución de 1853-1860 es que las provincias conservan todo el poder no delegado por la Constitución al Gobierno federal. El artículo 121 actual reproduce ese texto, pero a esta altura, parece una broma de mal gusto. Las provincias no delegaron en forma indefinida la facultad de establecer el impuesto a las ganancias u otros tributos (impuesto a los bienes personales, impuesto a la ganancia mínima presunta), y para un gobernante provincial, más cercano territorialmente a los contribuyentes, le resultaría políticamente más difícil saquearlos como ahora.

En suma, con más federalismo, el Estado tendría menos capacidad de hacer daño.

Finalmente: dejemos de discutir por nimiedades, frente a un gobierno con tendencias totalitarias. Que no nos pase lo de Venezuela.

Anónimo dijo...

Gracias, a eso iba.

Vladtepes dijo...

Rouges: Siestas del interior, incesto del conurbano, es lo mismo. Esta primate patasucia es excebrable. Ademas yo no soy porteño