4 de diciembre de 2009

Más de Sandra


Bueno, leí otro artículo sobre esa mujer aquí.
Si bien coincido en general, porque creo que la fulana no tiene todos los caramelos en el frasco, los hay peores.
Para poner un ejemplo: el ingeniero Julio César Cleto Cobos, que posiblemente nunca construyó ni un castillo de arena en la playa.
Yo formé parte del colectivo que se quedó hasta las 5 de la mañana esperando el voto del Senado cuando el asunto de las retenciones agropecuarias.
Obviamente, haciendo fuerza para que no se aprueben.
Finalmente, cuando la votación estaba empatada y era necesario que el hoy prócer desempatara, se me perforó la úlcera al escuchar sus prolongados e interminables lamentos y balbuceos incomprensibles, hasta que la momia viviente finalmente se despachó con su casi inentendible e impresentable 'mi voto no es positivo' que a decir verdad tendría que haber sido impugnado, teniendo en cuenta que cualquier ser humano normal vota por la afirmativa, por la negativa, o se abstiene.
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El hecho que este personaje dos veces traidor tenga -hoy por hoy- la mejor intención de voto como candidato a presidente de la ex-república, es un signo patético de lo bajo que ha caído la tierra de promisión.
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¿Con esa astilla quieren hacer fuego?
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1 comentario:

Carlos dijo...

Yo creía que como ingeniero había tenido éxito y había construido mucho en Mendoza.
De todas maneras, es lamentable que un tipo que juega al mismo tiempo en dos equipos (gobierno y oposición) tenga tanta aprobación por parte de la gente.
Si los radicales lo vuelven a recibir en el partido será por puro oportunismo porque ninguno de ellos ignora la forma en que se vendió al kakismo.