No cambió

Añoramos el pasado. A Cristina Kirchner la preferimos pedante y sarcástica antes que ridícula, por una sola razón: es la Presidenta.

Beatriz Sarlo en La Nación (Argentina)

No sé qué le pegó a la señora que escribe esta columna. Creo que la opinión generalizada es que siempre fue ridícula, al menos para los miembros de este blog.