Yad Shel

Bueno, siempre empleamos el Yad -יד- que es un puntero que nos permite no tocar con los dedos los textos sagrados.
Los təfiˈlin se hicieron para facilitarle a los hombres la comunicación con Di-s.
Las mujeres no estamos obligadas a usarlos, porque nuestra espiritualidad es naturalmente mucho más elevada que la de ellos, y no los necesitamos.
No obstante, muchas los usamos igual, pese a los enojos del Rabī.
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Después de todo Mīchal, la hija de Šāʾûl, se puso los təfiˈlin , y los sabios no se atrevieron a decirle nada.
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