Mucho se ha comentado en el blog sobre la necesidad de tener un Nelson Mandela argentino. Alguien que definitivamente cierre las heridas del pasado y proponga un mensaje de pacificación en una Argentina desgarrada.
El debate volvió a surgir con la aparición del ex tupamaro Pepe Mujica (protegido de BlogBis).
Bueno, en vísperas del feriado de la memoria les aviso a los que carecen de la misma, que los argentinos tuvimos ya nuestro Mandela, nuestro Pepe.
Fue Carlos Saúl Menem.
El tipo estuvo preso durante el proceso (igual que Mandela, igual que Mujica).
El tipo llegó al poder con el voto popular (igual que Mandela, igual que Mujica).
El tipo propuso un perdón para ambos bandos, pero no un olvido. Porque olvidar es condenarse a repetir errores. (igual que Mandela, igual que Mujica).
Luego, el 25 de mayo de 2003 llegó el demonio Kirchner.
Pero esa historia ya la conocen.
Es la historia de los que no quisieron perdonar, pero deliberadamente decidieron olvidar el horror de uno de los bandos.
Justamente hoy, y mientras paso unos días de descanso en la Mansión Ezcurra, recordabamos con unos amigos a la hora del té con scons, el día del golpe, el golpe que todos anhelaban, el golpe que fue saludado con banderas y vítores, el golpe que vino a dar un poco de tranquilidad en un país regido en la anarquía y la violencia.
La Argentina de hoy (o para ser más específicos la Argentina del 24 de mayo de 2003) no es parámetro para juzgar las acciones de terroristas ni la del aparato represor del estado que operaron en aquel entonces, cercano pero también lejano.
Nos los representantes del pueblo de la Nación Argentina, reunidos en Congreso General Constituyente por voluntad y elección de las provincias que la componen, en cumplimiento de pactos preexistentes, con el objeto de constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino: invocando la protección de Dios, fuente de toda razón y justicia: ordenamos, decretamos y establecemos esta Constitución, para la Nación Argentina.
El motivo de este post no era ver quién tenía mayor capacidad o ganas de hacer justicia para sí, sino mostrar lo evidente: Que hubo un intento de pacificación en Argentina y que uno de los bandos involucrados lo destruyó por las malas.
6 comentarios:
"pero deliberadamente decidieron olvidar el horror de uno de los bandos."
¿Que les impidió a las victimas y afectados por el terrorismo llevarlos a juicio desde el retorno de la democracia en 1983?
Si no se responde primero a esto, es absurdo avanzar el tiempo hasta nuestros dias, jugando de nuevo con la desinformacion, la confusion adrede y el ejercicio de la mentira y deformacion de la realidad.
"jugando de nuevo con la desinformacion, la confusion adrede y el ejercicio de la mentira y deformacion de la realidad."
hablamos el día en que muchos aprendan que 9000 o menos no es igual a 30000.
"Que les impidió a las victimas y afectados por el terrorismo llevarlos a juicio desde el retorno de la democracia en 1983?"
Qúe les impidió no. Quién les impidió. El Estado, que sistemáticamente les negó el acceso a la justicia. Y los organismos de "derechos humanos" que impusieron en la sociedad el criterio de que el muerto en cumplimiento del deber no merece justicia.
Me queda claro quién en este caso hizo ejercicio de "la desinformacion, la confusion adrede y el ejercicio de la mentira y deformacion de la realidad."
no solo no los llevaron a juicio , sino que los pusieron a gobernarnos . y no me refiero a la parejita, que ni para guerrilleros servian, sino a muchos de sus secuaces en el gobierno...
Estamos tan hechos pelota que no nos merecemos un berreta como Mujica.
Saludos!
A quién le van a hacer juicio las víctimas del terrorismo? No te contó nadie que los terroristas actuaban en la clandestinidad?
Durante el gobierno de Alfonsín se decidió juzgar a los jefes de ambos bandos: terroristas y militares.
Menem planteó la pacificación con los indultos. Indultó a militares y a terroristas también. Que estaban presos. Todo legal y constitucionalmente válido (art99 inc5)
Lamentablemente los terroristas disfrazados de organismos de derechos humanos se montaron en el lomo del demonio Kirchner para urdir su venganza y destruir el proceso de paz iniciado por Alfonsín y consolidado por Menem.
Para esto también tuvieron ayuda de gente supuestamente seria como la anuladora de leyes Carrió. Pero ese es otro cuento.
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