Señor Director:
"Hoy he sido testigo presencial de dos sucesos que me inducen a las siguientes reflexiones.
"Llegó a mi casa el libro de historia con el que la hija de mi esposa comenzará su tercer año de secundaria. El libro en cuestión está coordinado por el más mediático de los historiadores, que habla y escribe donde encuentra una tribuna amiga. El contenido está manipulado groseramente; los hechos históricos, sesgados tendenciosamente, signo inequívoco de una avanzada ideológica que tiene sus personeros y abanderados en distintas áreas del quehacer nacional. Músicos, cantores populares, deportistas, periodistas, historiadores, filósofos, etc., han abrazado con fervor esta causa «progresista, nacional y popular», iluminados que con su prédica obstinada, hermética y constante, inducen a cualquier desprevenido a equivocarse.
"Hoy, frente a mi ventana, en plena capital, un chico cartonero de unos quince años, aspirando pegamento de una bolsa.
"¡Argentina del bicentenario! Las mayorías silenciosas ¡miramos, escuchamos y aguantamos!"
Patricio Saint Martin
1 comentario:
En 1810 las Provincias Unidas construyeron una ficción como andamiaje de un proyecto a futuro.
Ahora la Argentina inventa una ficción para justificar su fracaso.
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