23 de junio de 2010

Sequía de órganos


Hubo algún momento en que la Argentina estuvo a la cabeza en la región en materia de transplantes de órganos. Ahora, parece que se atraviesa un marcado déficit de materia prima, o como dice elegantemente el ministro de salud santafesino "una disminución en la procuración de órganos".
No deja de ser curioso, siendo que el kirchnerato impuso (y la progresía pavota apoyó) la Ley del Donante Presunto.

Sigo preguntándome, si todo hombre tiene su precio, ¿por qué no sus partes?


(PS: notable como otra vez, la legislación en la Argentina logra el efecto inverso al buscado)

(PS 2: excelente oportunidad de recordar las disposiciones al respecto de Camilo José Cela)

2 comentarios:

Beto dijo...

Uno de los problemas mas grandes que tiene el sistema, no es precisamente que la gente no quiera donar, sino que llegan muy pocos cuerpos a los centros de salud con las condiciones necesarias para un transplante.

Y eso se debe a que la atencion primaria (ambulancias, paramedicos, guardias) y la burocracia hospitalaria, muchas veces es tan mala o tarda tanto que hacen caer cualquier posibilidad de trasplante.

Anónimo dijo...

Siempre me pareció muy revelador que la gente del tercer mundo son como los autos importados: valen más en partes que enteros.