Desde que apareció el tema de las centrales nucleares japonesas proliferan los comentarios apocalípticos sobre la radiación que se liberó/liberaría a la atmósfera. Sobran las comparaciones con Chernobyl, aunque los reactores involucrados son de tipo completamente diferente.
Ahora empezaron a difundirse las mediciones que tantos milisieverts, que tantos rads, etc, como si la vecina tuviera alguna idea de las magnitudes que implican estos valores.
Resulta que las bananas, comunes y corrientes, son naturalmente radioactivas por contener Potasio 40, y la cantidad de radiación que se ingiere con ellas (Banana Dose Equivalent) sirve muy bien para hacer entender el asunto.
Hasta el momento, la dosis más alta que recibieron los vecinos a las plantas llega al espantoso equivalente de comerse 30 bananas diarias.
2 comentarios:
Je ne mange pas les bananes
Potasio nao ten carozo.
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