30 de agosto de 2011

El fin de la democracia liberal

En los días que siguieron a las "internas" obligatorias se comparó acá en el blog a la actual democracia argentina con el período rotulado como Década Infame. Viendo hoy un artículo que analiza la composición del voto de los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo me queda claro que el término infame queda corto para describir la degeneración del sistema político argentino que ha logrado definitivamente confundir partido con Estado y ha llevado el clientelismo a una nivel de institucionalización que no creo que exista en otra parte del mundo.
Cuando se ve que el 48% de los pobres estructurales del país considera que la dádiva que se le asigna de por vida, por el sólo hecho de lograr una cópula productiva, le garante una "buena o muy buena capacidad de consumo" queda en claro que se les ha abortado -en la cabeza- toda idea de progreso.
Aquella mentada infamia de los 30 y 40 queda reducida a una ingenuidad. Ya no hace falta ni siquiera recurrir al fraude, porque los votos están asegurados con mantener al lumpenproletariat conforme. Y nunca mejor usado el término, ya que la mecánica clientelar le quitó a estas gentes toda condición de clase, reduciéndolos al mismo estatus que aquellos siervos de la gleba que pasaban de marqués a marqués y que ahora se traspasan de puntero a puntero.

6 comentarios:

carancho dijo...

Querido amigo, utilice el idioma con propiedad.
No es "Asignación Universal por Hijo" sino "Plan Reprodúzcase como Conejo, que le Pagamos por Ello".
Saludos.

Andy dijo...

Hay que poblar la patria, che.
Al final, la Diosa sigue el consejo de Alberdi y se quejan, manga de gorilones...
Y después le sacamos la tierra a los extranjeros que se la adueñaron y se la damos a los argentinos, para que la trabajen...
Mmmm, bad idea.

Klaus Pieslinger dijo...

Lapidario, Rubén. Está todo dicho.

Anónimo dijo...

En simple, conociendo Formosa, por ejemplo, lo que se ve es una generalización de esa política feudal hacia arriba, en vez de haber tenido una politica civilizadora hacia abajo. Hoy el país se parece más a Formosa que antes.

perogruyo dijo...

Lamentable y no puedo hallar otra lectura posible.

Oldchorip dijo...

No hay colmena posible si se la llena de zánganos...