24 de noviembre de 2011

La pesadilla de la dulzura


El sindicalismo pugna por más salarios, pero termina destruyendo puestos de trabajo.


1 comentario:

Recomendado dijo...

Obvio,
lo malo es cuando ves a gente como Adrian Suar en una entrevista por tv el otro dia repitiendo lo mismo que la mayoría de los políticos argentinos: que hay que "Industrializar" porque "se ha hecho poco".
Vivimos en el Siglo XXI ¿Cuantos siglos más hay que seguir financiando a los parásitos oligarindustriales con nuestros impuestos?