Todavía Cris no había dado su discurso en la ONU y ya el Daily Mail la hacía pelota:
"La Señora Kirchner es notoriamente una líder vanidosa. Desde hace rato se rumorea que se ha sometido a cirugía plástica, y alguna vez declaró "pintarse como una puerta" desde los 14.Por lo que no es difícil adivinar cuan agraviada debe haberse sentido la Reina del Bótox este fin de semana, con la publicación de encuestas que muestran que su apoyo se derrumba entre los argentinos"
"En los pasados doce meses se redujo a la mitad. Sólo en julio y agosto cayó 10 puntos. El apoyo ahora roza el 30%. La caída, para una mujer que ganó unas elecciones generales con una mayoría que los políticos ingleses sólo podrian soñar menos de 12 meses atras, no tiene precedentes en su carrera. Su nombre se está convirtiendo rápidamente en veneno político."
Véase: "Brace yourselves: Argentina's president Cristina Kirchner is on the political attack"
1 comentario:
"Cayó 10 puntos..."
Este pasado fin de semana asistí al casamiento de una sobrina. Una fiesta sencilla y sin muchos oropeles; pero íntima, cálida y emotiva, acorde con el espíritu (y el austero bolsillo) de los novios y los parientes.
Promediando el encuentro, uno de los invitados comenzó a recorrer las mesas entregando lo que pensé primero eran souvenires de la fiesta; pero al llegar a la mía, noté que el susodicho estaba repartiendo calcos con la leyenda "Clarín Miente - 7D" y llaveros con la frase "YPF es nuestra - Avanti Morocha"...
No faltó quien murmurase lo inconveniente de semejante disparate; no obstante un par de chiflas, no amedrentó al energúmeno para que completara la entrega, moviéndose entre las mesas como si estuviese jugando al 'rin-raje'. Supimos al toque que labura en la Secretaría de Comercio Interior; para aclarar, a viva voz, que venera a Moreno y a la VE como si fueran deidades, y que finalmente la liberación de la patria estaba resuelta a partir del 8 de diciembre.
Un coloquio que hubiese tomado calor y color a través de un tumulto, si no fuese por la oportuna puteada de mi sobrina, que lo mandó a sentarse con un sonoro carajeo.
Amén del episodio, lo llamativo del caso fue la indiferencia absoluta de los presentes, aún cuando muchos de ellos me consta que han sabido adherir graciosamente a este 'modelo'. La frialdad de la monada no fue solo por respeto a los esposados (y el reverencial temor por las agallas de la novia); sino mas bien un perfecto muestreo de la fenomenal caída en el rating que está teniendo este circo a contramano.
No me sorprendió la reacción. El hartazgo y la abulia que se reflejaron por igual le marcaron la agenda al salame; la palidez de la trucha fue prueba suficiente del acuse de recibo.
Al final de la fiesta, nos dimos cuenta que el 'morenito' hacía rato se había fugado sin siquiera despedirse; muy mal para un abanderado nac&pop. Los 'stickers' terminaron en el piso, confundidos entre la mugre del cotillón; y los llaveros, toscos y reflejos de amargos presagios, sumergidos en los mezcladitos deprimidos de las copas.
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