4 de octubre de 2012
Gendarmes
Hace un ratito pasé frente a la sede de la Región II de Gendarmería Nacional. Una docena de gendarmes congregados en el bulevar muestra que el conflicto sigue. Tranquilos, de uniforme, gente grande. Se han puesto un toldo de mediasombra para bancar el sol.
Ni siquiera un bombo.
No se dónde está el golpismo que ven trasnochados como Mempo Giardinelli, que en una desmesura hilarante trae a colación hasta el bombardeo a Plaza de Mayo. Una de dos, o son gusanos alimentados del compost oficial o prefieren el encuadre retro del conflicto para no asumir la realidad del colapso del Relato.
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5 comentarios:
A todo esto, dónde anda la encarnación de Keops?
Dopada hasta los párpados con suficientes psicofármacos y drogas duras como para enloquecer hasta el suicidio a los perros antidroga del Aeropuerto JFK de Nueva York, Carancho.
Salute!
¿drogas duras?
Usted dice Mayor?
'ta bien, no sé si para tanto, pero debe haberle dado sin asco al Clonazepam.
Gracias, Mayor.
Hace falta una sonrisa.
Ahora, que no se acerque a los perros, me gustan los animales... y ya la aborrezco bastante como para sumarle más razones.
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