12 de noviembre de 2013

Al final...

...el socialismo del Siglo XXI era sólo un TV LED a precio vil. 

Aunque al día siguiente no se pueda reponer ni un enchufe:

5 comentarios:

carancho dijo...

Ahora se acerca fin de año, y los animalitos mimados por el gobierno van a armar su propia "revolución".
Es decir: saqueos.

Unknown dijo...

BB, me temo que no entendés el funcionamiento del socialismo siglo XXI, los TV LED son comestibles...

Anónimo dijo...

La falta de moral de gran parte de la población sumada a la corrupción gubernamental hace que todos se distraigan del verdadero problema que tiene Venezuela, otrora gran país. Están permitiendo que los dictadores isleños cubanos pongan pie firme en el continente y traten de expandirse. Hay que despertarse urgente pues ya están golpeando la puerta de la Argentina.
Claudio

Vir dijo...

De comer y de limpiarse el traste ni hablar, pero al menos, en el momento que haya electricidad, van a poder mirar algo de tele....

Unknown dijo...

BB, lo más grave de la situación venezolana me sigue pareciendo la infiltración cubana en todo el aparato estatal, especialmente en las áreas clave de Interior, Educación, Energía, etc., etc.

Según me contaba un gomía caraqueño, los militares venezolanos de rango medio a alto ya están bastante repodridos de los cubanos porque parece los muchachos de barba se las dan de expertos profesionales y los gastan bastante a los venezolanos por su habitual desorganización y manera de hacer las cosas.

A veces se minimiza el fuerte orgullo nacional de muchos militares latinoamericanos que pueden estar más que dispuestos a ser forreados por sus generales, pero que no se bancan mucho que los forree un extranjero aunque no sea rubio ni yankee.

Maduro es un títere absoluto de Fidel y sus muchachos y el Pelado Diosdado Cabello fue primero militar venezolano y, luego, chavista. Y parece que Diosdado cree que una cosa es ser revolucionario y otra muy distinta fomentar el caos.

En todos los países del mundo a los muchachos de gorra y charreteras les jode el caos, porque aún el relajo tiene que hacerse ordenadamente en la mente castrense.

Veremos cómo sigue esta tragedia caribeña.