25 de octubre de 2016

Tercera pista



No se si alguno habrá experimentado una demora en Heathrow.
El aeropuerto opera desde hace años al noventa y pico por ciento de su capacidad, recibe 75 millones de pasajeros/año o sea unos 200.000 por día, en algo así como 1.300 vuelos diarios. 54 por hora, casi uno por minuto.
Si tu vuelo llega demorado y pierde el "slot" asignado, probablemente quede en espera 15 o 20 minutos, y al aterrizar no haya remolque, manga ni servicios, con lo que la llegada a la terminal se retrasa una media hora o más.
Por eso, hace años que se está bregando por una tercera pista que venía demorada por los ambientalistas que sostienen que otra pista deterioraría el medio ambiente y produciría un tremendo impacto en la huella de carbono.
Como si los aviones esperando no hicieran ruido, no gastaran combustible, y sobre todo como si el perímetro de Heathrow no estuviera ya suficientemente antropizado y la obra implicara destruir un santuario natural prístino.
En fin. Parece que finalmente se acabó la farsa y a pesar de que hoy mismo siguen las protestas la tercera pista está finalmente aprobada.



8 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay que darse una idea de la magnitud que significa el transporte aéreo en Europa, y particularmente en Reino Unido. Londres nada más tiene casi 10 aeropuertos servidores (Heathrow, Gatwick, Luton, City, Stansted, East Midlands, y el resto que no tengo presente ahora). Me llama la atención que en un radio de 50 a 100 km del Big Ben hay algunas bases abandonadas (WWII, Cold War) que en muchos casos las usan como depósitos de automóviles, pistas de carreras o actividades aeronáuticas menores. Alguna razón que no he llegado a averiguar debe haber para que no ocupen o reconviertan esos predios.
La gran cuestión a resolver a escala global es precisamente qué hacer con los grandes aeropuertos. El mismo problema de Heathrow se reitera en Boston, Chicago y ni hablar de Los Ángeles; las opciones son expandirse o reconvertir otros aeropuertos menores, para que funcionen complementariamente. El dilema pasa por el tamaño, y la magnitud de los servicios de apoyo, que podrían devorarse a la ciudad misma.
Frankfurt amplió con una cuarta pista, pero a cambio de su expansión estableció un perímetro 'verde', como forma de atenuar las alteraciones producidas por la actividad en el medio ambiente; eso sí, ya no puede crecer más y ahora están evaluando rediseñar el sistema. Por ejemplo, en el rodaje de aeronaves (esto es, el desplazamiento de los aviones desde plataforma hasta la cabecera y viceversa) se busca hacerlo mediante remolques eléctricos (una suerte de Scalextric gigantesco), para reducir consumo de combustibles y emisión de CO2 y ruidos...
Schiphol, en Amsterdam, se ha convertido en un monstruo que no para de crecer. Y así podría citar muchos otros aeropuertos...
Distinto en España, en donde la vanidad de muchos alcaldes 'visionarios' hizo que cada ciudad de rango medio y medio-bajo de la península tenga un aeropuerto. El resultado está a la vista: tres o cuatro aeropuertos en un radio de 20 kilómetros, y ninguno operando. Y lo más triste, algunos de ellos son verdaderas joyas arquitectónicas.
En nuestro país no existen problemas de crecimiento, y por mucho tiempo no creo que haya alguno. A la escasísima cultura del cabotaje, se suma una sobreabundancia de instalaciones. Muchas, pero hechas pelota; la cuestión aquí pasa por resolver la vetustez de los principales aeropuertos. Como dijera el malogrado Oscar Leimann-Patt "la actividad aerocomercial argentina se distingue por intentar hacer correr un Fórmula 1 en una pista de tierra".
No abordo el problema de Aeroparque y Ezeiza, porque no se puede superar la verdadera taradez de los porteños por aferrarse a la idea que te bajás del avión y en dos pasos tenés que estar en tu casa, oficina o teatro. Mientras tanto, hay unos 5 aeropuertos/bases militares en capacidad más que ociosa en el Coñourbano...
Otras absurdas paradojas son los aeropuertos de Conlara, Río Hondo, Villa María...lavaderos.
Nos encontramos con que como los chinos a la pólvora, nosotros hemos descubierto el transporte aéreo de cargas (y por el cual, los chilenos y brasileños están copando la parada). Y aún con la ventaja de ese sistema, no hay planes para adecuar algunas terminales. Tucumán despacha los arándanos por esa forma; pero desde que comenzó (hace 10 años, 10...), tienen que hacer malabarismos operativos para estacionar dos B747 en la plataforma...
Yo abrigo la esperanza que si se incorporan las low-cost, alguna reacción tiene que producirse en ese caso. Aunque me parece que este tema hay que refundarlo desde mucho más atrás.
Por cierto, en medio de la natural oposición al progreso y a la vida misma de una generosa cantidad de descerebraditos criollos.
Francisco

Anónimo dijo...

Volar en avión es de hétero

Anónimo dijo...

Francisco, incluso Ezeiza tiene capacidad ociosa porque tiene una ventaja que el Aeroparque no tiene: puede expandirse en lo que hace a construcciones. Y tranquilamente puede absorver el tráfico del aeropuerto porteño si pusieran una buena conexión por vía ferroviaria. Pero hasta que eso pase...

En el Congourbano no podés hacer que El Palomar funcione a pleno porque tenés áreas residenciales cerca que no van a dudar en protestar. Igual que Heathrow y otros lugares más. Si hay un aeropuerto con mucha capacidad ociosa, aunque en mal estado, ese es el de La Plata. Por eso el proyecto de la low-cost FlyBondi está viendo la posibilidad de usarlo como base principal. Total, solo el gobierno provincial lo usa...con suerte.

El aeropuerto de Santiago de Chile manejó durante 2015 más tráfico de pasajeros que el mismo Ezeiza y eso que se trata de una ciudad con la mitad de los habitantes de CABA y el Congourbano. Y tiene dos pistas, igual que Ezeiza.

Andrés

Anónimo dijo...

Comparto Andrés tus expresiones. Como dije, creo que hay que replantearse varios aspectos de lo que es hoy el sistema aeroportuario en nuestro país. Pero ello dependerá también de reformular absolutamente todo: desde las formas de desplazarse que tienen los argentos, la formación de precios quitando carga impositiva y una infinidad de aspectos que podrían definir que tipo de servicio se está en condiciones de brindar y de utilizar.
Hay muchos aeropuertos en el país que están linderos a zonas urbanas/residenciales. Calculo que las oposiciones y las objeciones a las eventuales mejoras que se puedan realizar podrían ser originadas a partir de esas afectaciones; pero las mayores resistencias vendrían de toda esa acuarela de personajes tan siniestros como el Pollo Sobrero (por citar un ejemplo), que días atrás se opuso al soterramiento del Sarmiento con argumentos cavernarios.
De igual manera el caso Uber, que es una muestra de lo difícil que es penetrar la costra premoderna que todavía impera en los criterios de la mayoría dirigente (y empresaria, por caso).
El panorama es un poco desalentador; no quiero pecar de pesimista, pero entreveo mucha improvisación en el tema. El tan proclamado Plan Belgrano es una suma de buenas intenciones, pero sin proyectos elocuentes, o bien definidos tácitamente.
Ojalá podamos hablar en un tiempo de mejoras para Ezeiza, o que la actividad aerocomercial tenga la buena sustancia como para reactivar la enorme ociosidad que se verifica en la mayoría de los aeropuertos nacionales.
Francisco

Sine Metu dijo...

Jaja. los bobiernos provinciales no te viajan low cost ni que les secuestres a sus madres

Anónimo dijo...

Gente, el problema con Heathrow es que está rodeado de urbanizaciones. Cualquiera que haya viajado con desde Londres a el aeropuerto podrá comprobarlo. El problema es que esta gente vive en esa zona desde mucho antes de los planes de expansión. Incluso muchos argumentan (con razón) que la zona urbana se expandió al dar certeza de que nunca se construiría la tercera pista (gobiernos de Blair y Cameron). Londres no es el Gran Buenos Aires: simplemente no hay lugar para relocalizar las 700 familias directamente afectadas, incluyendo la escuela primaria del pueblo. Hay casos documentados de tres generaciones viviendo en la misma calle, casa continua. Qué hacer con esos casos? Repito, en el mercado inmobiliario actual de Londres, no existe posibilidad de relocalización. La cuestión ya costó la renuncia del MP del constituency afectado, y no hay pocas resistencias dentro de los Tories. Cuál es la solución? No lo se, tal vez empezar a descentralizar un poco Londres (ejemplo, moviendo parte de Whitehall a lugares como Liverpool, Birmingham o Manchester). Pero me gustaría ver la reacción de vosotros si se encuentran en la situación de estas familias cuyas vidas se verán afectadas por un largo tiempo. Un saludo, Mariano

Anónimo dijo...

El problema es que los argentinos no pasaron a la adultez y aman viajar en trenes. Me da ternura todos los intentos de reflotar el transporte ferroviario de pasajeros. Claro, lo hacen con la tuya.

Pablo dijo...

Mariano, a esas familias ya arreglaron pagarles el 125% del valor mercado de sus inmuebles.
Por otra parte la protesta mayoritaria es por el tremendo impacto en el cambio climático, y no en la vida de los vecinos.

(posdata: culquiera que venda una semi-detached en la futura pista se puede venir a vivir a un depto en Libertador y Austria y con lo que le sobra vivir de rentas toda el resto de su existencia)