29 de julio de 2013

Maltas y whiskies


En la visita a Escocia me desburré un poco sobre el mundo de los whiskies verdaderamente premium. Asombra encontrar que en los (innumerables) negocios del ramo, no se ven prácticamente las marcas que uno está acostumbrado a ver en Free Shops o vinerías más o menos provistas.
Nada de Johnnie Walkers de ningún color, ni Chivas ni, mucho menos los populares JB o Vat 69. Esos son del mundo de los blended whiskies que parece que están considerados berretadas para la gilada.  En uno de los pocos locales donde se dignan vender blends me sorprendió encontrar un ¡Old Smuggler! claro que no un Smuggler argento sino la versión escocesa que parece que se embotella desde 1835 y que es marca popular en Bélgica.
El asunto es que en estos sitios (o en el enorme Museo del Whisky, de Edimburgo) uno se encuentra con marcas que para ignorantes del mundo de los Single Malts suenan completamente exóticos: Dalwhinnie, Caol Ila, Oban, Blair Atholl, Cardhu, Cragganmore, Lagavulin, Talisker... y precios extravagantes que arrancan en las 35 libras y terminan.... no sé. Vi alguna botellita de 400 libras y pico, pero hay que considerar que los delirantes impuestos británicos sobre el alcohol distorsionan los precios de manera notable, al punto que un Caol Ila -por ejemplo- se pague lo mismo allá que en Rosario. Los precios son tan locos que una muestra de 3cl anda entre 4 y 9 libras. O sea que llevarse una botellita para probar una de estas maltas cuesta a libra blue entre 60 y 130 pesitos.
Claro que en varios sitios se encuentran connoisseur bars que donde con un poco de paciencia y cara dura uno puede probar gratis estos licores, como por ejemplo un Laprhoaig Triple Wood de 25 años (y 263 libras la botella), que será servido en un vasito de cuello alto bombeado -como una pantalla de farol de kerosén- con el agregado de agua mineral cuidadosamente pipeteada bajo la atenta atención de un scotsman que explicará las características del whisky.
Ah. Y tengan en cuenta. No les gusta nada que a sus whiskies les digan scotch, salvo si es para diferenciarlos de un whisky irlandés

9 comentarios:

Leandro dijo...

Una vez probé el Caol Ila. Acá nomás, en Güenosaire, con la anécdota de que cuesta lo mismo la botella aquí que a 2 minutos de la destilería.

Pucha, la verdad, siendo un total ignorante del tema... no volvés a tomar nada que no venga de la zona.
Y eso que soy mas del bourbon que del whisky.

Anónimo dijo...

¿como anda el "Mariposa Cusenier", por las Scottish Highlands? - JUAN

Sine Metu dijo...

Lagavulin probé en O'Connell's de calle Paraguay allá por 2001 o 2002.
Y tenían una repisita con varios entre los que recuerdo además el Oban.

Anónimo dijo...

El Lagavulin y el Laphroaig son néctar de los dioses...

Unknown dijo...

Muy interesante, Rubén, me hubiera encantado andar por Escocia. Me imagino que Sine te habrá dado las coordenadas precisas para degustar los whiskachos esos tan económicos...

Dicho esto, ¿nunca un museo no bélico, ni un convento, palacio o castillo histórico o una galería de arte? ¡Jajajajaja!

Me imagino que cuando concretes mi muy recomendado viaje a Normandía y Bretaña, puro bunker, baterías, Omaha Beach, Saint Mere Eglise, Pegasus Bridge y Calvados, mucho Calvados, ...

Max A Secas dijo...

Siendo un borrachin del whisky escoces y habiendo probado mayoría de los whiskies nombrados (botellas enteras en algunos casos), me considero un connoiseur of sorts, y el tema de la mayorí ade esos single malts son bastante ahumados, y eso los hace un poco fuertes, salvo el Cardhu. Son mas licorespara tomar un sorbo que un highball con hielo como le dariamos acá. Para empezar con los single malt el mas accesible y conseguible, y excelente, es el Glenlivet.
Eso si, una anecdota, los escoceses en los pubs de pueblo tienen todas estas joyitas en las vitrinas, pero en el día a día toman Famous Grouse, son duros para largar un mango.

BlogBis dijo...

Don Enmascarado Ud sabe que lo mío SON los edificios históricos, palacios, castillos y Museos...
Tengo visitados esta vuelta sofocientos museos regimentales, al punto que Mrs. Blogbis y Blogbis Jr. cada vez que veían un museo militar salían huyendo!
Tengo en borrador un post sobre el memorial de los Commandos, frente al Ben Nevis. Y algo sobre el maestro Mackintosh.
Stay tuned!

Unknown dijo...

¡Jajajajaja! Rubén querido, tenés razón, yo sé que lo tuyo SON todas las cosas que señalaste, pero no pude resistir la tentación de "pincharte" porque hay lectores que no conocen tus más que amplios y documentados conocimientos de Historia Militar.

Espero con ansiedad tu post sobre Commandos.

(En Viena y en París, me pasó con la Enmascarada y la Enmascaradita, lo mismo que a vos con los tuyos...Por suerte lo tenía al arquitecto que me hacía gamba.)

Anónimo dijo...

Van a tener que disculpar la herejía, pero a mí "Lagavulin" me suena a nombre de vacuna o suero anti algo.

"Tome, aquí tiene la receta, vaya ahora mismo y hágase aplicar 250 unidades de Lagavulin si no quiere que se le trefilarice la fascia del escandrifolio...!"