15 de abril de 2018

Echándole la culpa al empedrado









  Dejare de hablar de los inmigrantes ilegales, después de todo, el propio Presidente de la República, el empresario Sebastián Piñera le ha dado la espalda a sus electores , los cuales no querían un “perdonazo” a los ilegales, sino simplemente que aplicará la actual Ley de Extranjería y que detuviera el flujo de los falsos turistas haitianos que no andan el desierto de Atacama o en las Torres del Paine gastando dinero. Hoy lunes 9 de abril firmó el decreto que permitirá regularizar a 300 mil inmigrantes ilegales.

  El piñerismo es tan tonto que por un canal de Youtube me enteró que le pidieron consejo al ex director de la Extranjería e Migración del segundo gobierno de Bachelet, Rodrigo Sandoval que durante los cuatro años no aplico la ley.

 Por ese medio también me entero que la organización jesuita “Techo para Chile” está trabajando con el gobierno para darle facilidades a los inmigrantes para accedan a viviendas. Lo que significa que el gobierno comprará terrenos o se los dará como el Ferrocarriles del Estado.

   En otro ámbito en que no aplica la ley y la fuerza es materia de Seguridad, donde convoco una comisión transversal. Allí está la ex candidata a la presidencia por la Democracia Cristiana, Carolina Goic, quien durante la campaña presidencial manifestó que ni a misa con Sebastián Piñera. No fueron esas sus palabras. Se entiende lo que quiero decir.

  No voté por Piñera en la segunda vuelta a sabiendas que estuvimos cerca de “Chilezuela”. Ahora tenemos una tregua de cuatro años. O quizás nos estamos engañando. Después de todo, el segundo gobierno de Sebastián Piñera lo denominé “El segundo gobierno de la Nueva Mayoría” o “El sexto de la Concertación”, según la orientación que tomen sus políticas públicas. Quizás Piñera muy a pesar de los electores que no querían el continuismo de Bachelet, le entregue la banda presidencial a un candidato opositor. Lo cierto es que no hará políticas orientadas hacia la derecha. Ya lo estamos viendo con cada anuncio lleno de parafernalia.

    Antes que Sebastián Piñera asumiera el pasado 11 de marzo una revista Que Pasa entrevisto a Marcela Sabat  diputada de Renovación Nacional que pretende revivir el sector liberal. Ella se define como ala liberal de ese partido en la línea de Andrés Allamand. Quiso formar una bancada transversal feminista en el congreso.

 Según ella, el ex presidente de RN, Carlos Larraín “extirpó al ala liberal de RN, y eso se celebró”.

 Asimismo, el periodista le afirma a Sabat que el proyecto que tenía Andrés Allamand con su postura liberal fracaso a principios de los 90. Ella le responde: “RN históricamente ha tenido intentos de abrir camino en el ala liberal. Siempre se quiso lograr una mirada menos conservadora en lo valórico. Pero también hay que ampliarse hacia algo menos intransigente en la dimensión entre el Estado y el mercado, llegar a algo que no sea blanco o negro”. No le molesta que los servicios que presta el Estado sobre todo en salud y en educación sean los malos. Ni siquiera menciona achicar el Estado.

 El ex ministro de Defensa del primer gobierno de Piñera, Allamand se encargó de arruinar a la derecha cuando acuñó la expresión ‘los poderes fácticos’ que supuestamente manejaban el poder del sector. Eso fue más bien para otros políticos de la derecha no le hicieran sombra. Además, se olvida Sabat que Allamand perteneció a la nefasta ‘Patrulla Juvenil’ de los noventa junto con el actual Presidente de la Republica, Sebastián Piñera, el actual ministro de Defensa, Alberto Espina y la ex candidata a la presidencia, Evelyn Matthei. El sector que se dice liberal en vez de oponerse a la reforma tributaria del primer gobierno de la Concertación liderado por el demócrata cristiano, Patricio Aylwin voto a favor y los conservador de la UDI liderados por el ex senador asesinado Jaime Guzmán se opusieron. Desde entonces le han dicho amén a cada reforma o tontera de la ex Concertación y de la ex Nueva Mayoría con las enmiendas. La gente como Allamand aprobó la nefasta reforma tributaria expropiatoria. La derecha ha cedido a la Izquierda en todos los ámbitos. Así llegamos al primer gobierno de Piñera apoyado por pinochetista, la ‘familia militar’ y los descolgados de la ex Concertación, en que el ex ministro de Interior del mismo partido de Sabat, Rodrigo Hinzpeter declara que el sector ‘ganó con el bandera del adversario’. Ese gobierno de fue centro izquierda.

¡Y qué decir las reformas o desmantelamiento a la Constitución de 1980 con los votos de Allamand y Cía!

 Ella dice que respeta la diversidad: “Tenemos parlamentarios que se atreven a hablar sin complejos, y a plantear una postura más radical, respetando siempre la diversidad”. Sin embargo a quienes mantienen sus principios los tacha de fundamentalistas. Y se pavonea que su partido haya cambiado sus principios para parecer más progresistas y culpan a la derecha tradicional: “La derecha tradicional olvida cómo va avanzando la sociedad. Cuando RN abre la puerta a conservadores y liberales está escuchando los resultados electorales. No nos podemos quedar desfasados —que es lo que le pasó a la UDI, que no renueva su carta de principios—, sin tener empatía con el mundo actual, que pide ir más allá de los fundamentalismos”. Nótese que habla de empatía no de dar razones para tal como lo hacía el senador asesinado Jaime Guzmán en los nichos históricos de la Izquierda que luego se pasaron al otro lado. Importa lo que yo sienta por el otro y no la verdad. Tampoco hay que señalar el error y la falsedad.

 Hace tiempo dije que los sectores que se llaman liberales como los de Renovación Nacional, Amplitud y Evolución Política (Evópoli) les gusta hablar de la diversidad siempre y cuando se piense como ellos. O de lo contrario, los que tienen todo el derecho a discrepar de ese grupo y defender su postura se los tilda de ‘fundamentalista’.

Hay recordar una vez más que durante el primer gobierno de Piñera un grupo de académicos instaron a solamente a los partidos de derecha, la Unión Demócrata Independiente y Renovación Nacional que cambiara principalmente en que elogiaba al pueblo chileno y a las Fuerzas Armadas por haberse rebelado contra un gobierno que quiso instalar un gobierno totalitario. A la Izquierda no se le pidió nada como por ejemplo, sacar las dos estatuas de Salvador Allende que hay en La Moneda. Una por delante y la otra junto los ex presidentes.
   
   La declaración de principios de RN rezaba así sobre el 11 de septiembre chileno: Renovación Nacional destaca el patriotismo y espíritu de servicio de las Fuerzas Armadas y Fuerzas de Orden, cuyo origen y gloriosas tradiciones se identifican con el surgimiento y defensa de la chilenidad a través de toda su historia. Incluida su acción libertadora del 11 de septiembre de 1973, que salvó al país de la inminente amenaza de un totalitarismo irreversible y de la dominación extranjera, culminando así una valiente resistencia civil y recogiendo un clamor popular abrumadoramente mayoritario".  Ese artículo cuenta los eventos como realmente sucedieron. No me había fijado en las siguientes palabras: “No podemos quedarnos en un pasado dogmático”. ¿Qué quiso decir? ¿Duda de la legitimidad del derrocamiento de Allende? ¿No hay que cuestionar el sesgado Museo de la Memoria de Bachelet? No hay que defender la Verdad Histórica tal como lo hizo José Piñera en su libro Una Casa Divida, Julio Bazán Álvarez en su libro Lo derroco el pueblo y, por último, el historiador y columnista, Gonzalo Rojas Sánchez en su libro Chile eligió  la libertad. ¿Hay que dejar que la Izquierda imponga su versión, pues ese sector le teme al debate? Dogma significa decreto por lo cual se desprende que por ley desea prohibir que un grupo chilenos cuente la verdad del Gobierno Militar.

 Ya que se pavonea la nueva declaración de principios de Renovación Nacional, si es que no equivoco abundan expresiones progresista como por ejemplo, que en Chile es un país multi étnico, cosa que hasta 1990 todos éramos chilenos incluyendo los mapuches y aymaras. También recuerdo que enfatiza la defensa de los derechos humanos, sin embargo, al estilo de la Izquierda.

 Sólo  parlamentario Baldo Prukorica de RN ha visitado Punta Peuco.

 ¿Tendrá empatía por los ancianos del mencionado penal?

 También hay que recordar a losa cobardes académicos y analistas que suscribieron la “Carta transversal sub 40 pide “esfuerzo colectivo” para reconciliación” muchos se caracterizan por sostener que la ex derecha está ciega, sin rumbo, mientras reniegan del Gobierno Militar: “Cristóbal Bellolio, Daniel Brieba, Gonzalo Bustamante, Max Colodro, Jorge Fábrega, Camilo Feres, Jorge Ferrando, Andrés Hernando, Francisco Irarrázaval, Hernán Larraín M., Davor Mimica, Roberto Munita, Macarena Ponce de León, Slaven Razmilic, Javier Sajuria, Rafael Sánchez, Sergio Urzúa, Valentina Verbal, Paz Zárate e Ignacio Briones”. El coordinador de tan nefasta iniciativa fue el hijo del actual ministro de Defensa y arrepentido, Hernán Larraín, Hernán Larraín Matte de la Fundación Horizontal.

  Así, por ejemplo, la historiadora Valentina Verbal del Instituto Libertad y Desarrollo saco el libro La Derecha perdida el año pasado. La historiadora está tan perdida que suscribió la famosa carta por la Reconciliación y los Derechos Humanos. O sea, la historiadora está diciendo que si volviera a repetir la misma situación de la Unidad Popular, los chilenos no tenemos derecho a la rebelión cuando un gobierno se ha salido de la ley y de la Constitución. El país no está reconciliado y siguen persiguiendo a los militares. E igualmente está perdido el director del Instituto LyD, Luis Larraín que suscribe la tesis de la ficción jurídica del ‘secuestro permanente’ contra los militares de Punta Peuco.

 Por cierto a ese sector que se dice liberal se hacen leso ante la abierta prevaricación de la Justicia y no la igualdad ante ley. Este último es un valor que toda persona se que dice liberal le importa. Por tanto, esos liberales deberían estar escandalizados que a los presos políticos de Punta Peuco, le niegan todos los derechos. No sólo la amnistía y el indulto, sino los derechos carcelarios. Por tanto, ese sector es cómplice pasivo de la crueldad que los sufren los ancianos del gulag o campo de exterminio de Punta Peuco. Allamand, Espina, Hernán Larraín y el actual presidente Sebastián Piñera aprobaron los indultos a los terroristas.

  Antes de terminar, la última tontera que dijo la diputada Marcela Sabat fue raíz de ley de identidad de género, en que ella apoya que los niños mayores de 14 años tenga derecho a cambiarse de sexo: “Gracias a Dios estoy en RN y no en la UDI”. Tenía en entendido que Dios creo hombre y mujer, y no transgénero. Ni siquiera quiere admitir que el trangénero es un desorden mental y que se grupo cuando se cambian de sexo tienen altas tasas de suicidio. Le importa la empatía, no la verdad. De ahí su apoya al matrimonio igualitario. Conste me he fijado en lo que dice la diputada.

No he fijado si es mujer y rubia de 36 años.

2 comentarios:

carancho dijo...

Acá Macri, por decreto, decidió un control más estricto a la inmigración.
Por supuesto, un juez progre lo tumbó.
No sé como sigue el tema.
Es increíble la similitud entre el zurdaje de los 2 países.

Javier Bazán Aguirre dijo...

carancho:
Los zurdos son internacionalistas. Mejor dicho, siguen el mismo manual por así decirlo.
Acá Piñera se acobardo. No quiso aplicar la ley vigente.
Además, están detrás los jesuitas.