Al final el Canciller-Jardinero dió el sí, y aunque se hacía pis por ir a pasear su perfil griego por la Korte Suprema, lo mandaron a hacer punta en la Ciudad de Buenos Aires.
Él, como buen soldado montonero, aceptó sin chistar.
Para ver más del asuto y como el personaje no merece más esfuerzo me remito a éste post, de dicembre pasado. Por lo menos si lo eligen diputado hay una chance que vaya a la Cancillería alguno que sepa algo del tema.
argenblogs
5 comentarios:
Que país generoso. Cualquiera sirve para cualquier cosa, canciller, diputado o jefe de bomberos.
Asi nos va.
Esto me suscita sentimientos encontrados. Por un lado, es cierto, qué país generoso. Un tipo que no puede ser canciller, ahora prueba (o lo hacen probar) suerte de diputado. Lo bueno también radica ahí, que se abre la posibilidad de que entre otro canciller (no caganciller). Además ahora se somete a una elección, regalada, sí, pero me muero por ver qué pasa si no le salen las cosas como planea. Mirá si un fascista derechista le lllega a pintar la cara.
El actual caganciller es un típico chanta argento de café, que si lo pones a tostar teresos seguro te los quema. Eso si, lo dejas hablar y se cree una lumbrera del pensamiento moderno.
¿Les gusta Bonasso de Kanciller?
Lo peor de todo es que el próximo canciller puede ser aún peor que este.
Lamentable.
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