Allá por los años ochenta, cuando se reestablecieron las democracias en latinoamérica y se desactivaron los conflictos limítrofes mas calientes todo parecía indicar que por acá no había riesgos de ninguna especie. Y así muchos gobiernos actuaron en consecuencia.
Ministerios de Defensa y Cancillerías, se desentendieron de toda idea de conflicto especialmente después de la caída del muro. Y a pesar que la amenaza de los grupos terroristas seguía activa (Sendero Luminoso, FARC, etc, etc) y que regiones enteras quedaban en mano de los carteles de la droga.
Estados Unidos advirtió más de una vez y de diversas formas sobre la necesidad de establecer control sobre virtuales áreas sin ley, y pidió la colaboración regional para la estabilización del problema en Colombia (como ejemplo, en 1998, 1999 ó 2003) . Todos se hicieron los burros, especialmente en el Cono Sur.
El 9/11 puso el foco en el otro lado del mundo, y aunque acá sonó más de una alarma, todos siguieron mirando para otro lado, mientras tanto la progresía y los grupos nacionalistas coincidían justificando el interés norteamericano en un supuesto complot para quedarse con el agua (¿? y más ¿?).
En los últimos tiempos, el expansionismo de la "revolución Bolivariana", la connivencia entre guerrilla y narcotráfico, y la proliferación de síntomas de aparición de estados fallidos ha vuelto a poner la atención norteamericana en la región, pero ya parece que han aprendido a no pedir ayuda, y decididos a hacerse cargo ellos mismos del tema todo indica a que vamos a ver una presencia militar norteamericana en Paraguay. Aunque el Presidente Duarte desmiente que se trate de una "base", el gobierno paraguayo ha firmado acuerdos permitiendo el ingreso por tiempo prolongado, de unos 400 efectivos.
Las reacciones no faltan, desde quienes denuncian la avanzada imperialista, quienes ya dan por hecho que los soldados están allí y a quienes quieren imaginar un enorme Da Nang amazónico.
El conflicto, próximamente en ésta sala.
argenblogs
Ministerios de Defensa y Cancillerías, se desentendieron de toda idea de conflicto especialmente después de la caída del muro. Y a pesar que la amenaza de los grupos terroristas seguía activa (Sendero Luminoso, FARC, etc, etc) y que regiones enteras quedaban en mano de los carteles de la droga.
Estados Unidos advirtió más de una vez y de diversas formas sobre la necesidad de establecer control sobre virtuales áreas sin ley, y pidió la colaboración regional para la estabilización del problema en Colombia (como ejemplo, en 1998, 1999 ó 2003) . Todos se hicieron los burros, especialmente en el Cono Sur.
El 9/11 puso el foco en el otro lado del mundo, y aunque acá sonó más de una alarma, todos siguieron mirando para otro lado, mientras tanto la progresía y los grupos nacionalistas coincidían justificando el interés norteamericano en un supuesto complot para quedarse con el agua (¿? y más ¿?).
En los últimos tiempos, el expansionismo de la "revolución Bolivariana", la connivencia entre guerrilla y narcotráfico, y la proliferación de síntomas de aparición de estados fallidos ha vuelto a poner la atención norteamericana en la región, pero ya parece que han aprendido a no pedir ayuda, y decididos a hacerse cargo ellos mismos del tema todo indica a que vamos a ver una presencia militar norteamericana en Paraguay. Aunque el Presidente Duarte desmiente que se trate de una "base", el gobierno paraguayo ha firmado acuerdos permitiendo el ingreso por tiempo prolongado, de unos 400 efectivos.
Las reacciones no faltan, desde quienes denuncian la avanzada imperialista, quienes ya dan por hecho que los soldados están allí y a quienes quieren imaginar un enorme Da Nang amazónico.
El conflicto, próximamente en ésta sala.
argenblogs
3 comentarios:
no leí nada sobre esto, voy a ver qué se dice en inglés...
Ya lo dijo lilita... se vienen a llevar el agua!!
Y en botellas de litro y medio
MAESTRO Donald Rumsfeld.
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