20 de mayo de 2007

Lo que va asomando


La imagen del iceberg, que usé el 27 de abril es más que adecuada. Pero lo que aparece cuando baja el agua no es precisamente hielo.
Hoy La Capital adelanta que mientras el tema de Skanska y el Gasoducto Norte está recalentándose hay datos de otro negocito, esta vez por 60 palos en el gasoducto Cordillerano-Patagónico, que en este caso no ejecutó una empresa trasnacional sino una típica Empresa K, Emgasud.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

En otro artículo Usted mencionó las obras viales. Y falta que salte la liebre en las obras eléctricas, todas administradas por el gran De Vido.
Va a resultar que este es el gobierno más corrupto de la historia argentina.


DLS

Louis Cyphre dijo...

Por algún motivo hay mucha gente sorprendida, entre legos y entendidos. Perdón, pero ¿somos o nos hacemos?

¿Podemos realmente sorprendernos por estas cosas? Creo que no digo nada nuevo cuando vuelvo a repetir lo que ya dije varias veces por acá. La corrupción es directamente proporcional al grado de discrecionalidad de los funcionarios. Cuanto mayor es el apego a normas legales generales y parejas para todo el mundo, menor el grado de discrecionalidad. Cuando la discrecionalidad alcanza los niveles de la Argentina post golpe de fines de 2001, cuando no quedó en pie ni un solo contrato, las oportunidades de corrupción se multiplican exponencialmente.

En un país donde un funcionario controla absolutamente todo, desde el precio de la tirita de Geniol hasta qué se puede producir y exportar, creo que no hay que ser un experto internacional en política pública para saber cómo termina la historieta.

Parecemos chicos de jardín de infantes.