Ídolo, pero poco

Sine Metu se mandó hoy una muy buena cobertura del acto del 20 de junio, que el Néstor volvió a aprovechar para zambullirse entre la gente y sentirse ídolo popular, olvidándose que la mayor parte de la multitud que se le abalanzó fue a tocar al "un" presidente, y que les hubiera dado lo mismo acercarse a cualquiera que ocupara el cargo porque en realidad lo que buscan es la sensación, tal vez única en sus vidas, de estar cerca del que manda. El pingüino cae otra vez víctima de su alzheimer selectivo al pensarse objeto de tanto fervor, que fue el mismo que en su momento envolvió a Duhalde, a Menem, Galtieri o a Videla.

El sitio Rosario3 puso en la web una encuesta en la que preguntó a los rosarinos qué es lo que más gusta de la celebración del Día de la Bandera. Las respuestas no dejan lugar a dudas: la presencia presidencial entusiasma sólo al 4%. (Gracias, Horacio)