A mi no me quedan dudas que el gran ganador de la cumbre-sainete del Grupo de Río fue el presidente Colombiano, que no solo se fue con un "pero no lo vuelvo a hacer" digno del Chavo del Ocho, sino que dejó expuesto que tanto Venezuela cmo Ecuador venían amparando las acciones de las FARC contra su territorio.
Se ve que la opinión debe ser generalizada, ya que Chávez, y la Gran Jurista pusieron a trabajar a sus aduladores profesionales para encontrar en qué fueron responsables del "éxito". Para la prensa chavista, fue el discurso de Chávez. Para la prensa berreta argenta, fue un chiste de Cristina
Se ve que la opinión debe ser generalizada, ya que Chávez, y la Gran Jurista pusieron a trabajar a sus aduladores profesionales para encontrar en qué fueron responsables del "éxito". Para la prensa chavista, fue el discurso de Chávez. Para la prensa berreta argenta, fue un chiste de Cristina
7 comentarios:
En Miss Simpatía, Sandra Bullock era una agente de policía que tenía que infiltrarse en un concurso de belleza para descubrir no sé qué cosa. Las candidatas a reina eran estereotipos de mujeres unineuronales, rubias taradas de pueblitos sureños norteamericanos de ésos en los que el día más interesante del año es Halloween. Chicas bobas pero sin maldad. Y sin ni un poco de morbo propiamente dicho. El morbo norteamericano, para el gran público, es la estupidez.
Cuando tenían que hablar frente al micrófono y demostrar que no eran sólo pedazos de hembras, sino también corazones palpitantes y mentes despiertas, las candidatas coincidían en un punto: a la hora de contarle al jurado “con qué soñaban”, todas decían: “Con la paz mundial”.
El morbo norteamericano, decía, para el gran público, es la estupidez. Pero en privado, entre pocos, entre líneas, en el fondo, en el patio trasero, en rigor, a juzgar por los hechos, creo, el morbo norteamericano es tremendo. No hay, y nunca hubo límites cuando, en diferentes oportunidades históricas, Estados Unidos se sintió amenazado o atraído por algo. El morbo norteamericano para manipular la realidad y convertirla en un discurso para débiles mentales es tremendo. Como es tremenda, y apabullante, la docilidad de sus agentes multiplicadores locales.
Las ideas desplegadas en la cumbre de ayer por el presidente Uribe siguieron esa línea políticamente patriarcal, típica de la política exterior norteamericana, de “reservarse el derecho”, cuando no tiene ningún derecho. Sostener tímida pero indudablemente la idea de “ir a buscar al terrorismo donde estén los terroristas” es morbosamente estúpida, pero por estupideces es que han muerto millones de personas muchas veces. Por estupideces se han desatado guerras y se han instalado odios ancestrales. Esa política ya dio incontables muestras de que encubre otros móviles. Violar el espacio aéreo de otro país escudándose en que aquel a quien se buscaba asesinar era “un terrorista tenebroso” explica básicamente que la casa se reserva el derecho a calificar a la gente como “asesinable”, al espacio aéreo del país vecino como “violable” y las recomendaciones de los grupos y cumbres de países como “obviables”.
Si Uribe suscribe como un buen hijo de Bush toda la idea, él, como Bush, lo diga o no, se reserva el derecho de hacer lo incorrecto y después pedir disculpas. Eso es en sí mismo una amenaza, como Estados Unidos es también una amenaza.
“La paz mundial”, como repetían las aspirantes norteamericanas a reinas, no es absolutamente nada. Las rubias taradas repetían eso como quien dice soy buena, mirá qué culo que tengo. Eso dice Bush. Soy bueno, qué pena ese temita de los rehenes en Colombia, ¿era Colombia?, qué pena que lo esté por solucionar un populista, en fin, y bueno, que Uribe se pase de la raya, ja ja, la raya, y que se maten entre ellos.
La paz mundial no es nada. Es apenas un bocadillo de circunstancia tan banal que puede ser repetido por aspirantes a reinas de belleza sin nada en la cabeza. Si no se tiene nada en la cabeza, bien, puede uno ponerse a hablar sobre lo lindo que sería que en el mundo reine la paz. Pero la paz regional es lo único importante en estos días. La paz regional no está en la agenda norteamericana.
La paz latinoamericana, para los latinoamericanos, debería ser lo único importante en estos días. Y fue un alivio escuchar ayer al abanico de presidentes de esta nueva América latina, que salvo Colombia, no está ya acechada por organizaciones guerrilleras y se debate en procesos democráticos que buscan darse fuerzas recíprocas. Para la paz hay equipo. Puede haber laderos sueltos, pero en América latina hoy no hay vicios carnales. Hay política.
Pues te diré que, por las noticias que se han dado en España, la sensación es que pidió perdón por el asunto...
¿Que querés que te diga?
Para mí que entre la botóxica y el simio hay relaciones carnales.
No puedo descartar sexo oral y azotes, y no es difícil adivinar quién hace y quien recibe qué.
Al del comentario anónimo:
Ser pacifista y ser pacífico son dos cosas distintas.
El pacifista no controla su vida, se la controla quienes tienen el poder de zamarrearlo, ya que es un tipo que no se va a defender.
El pacífico no se mete con vos, pero si tiene una pistola más grande que la tuya, más te vale que no te metas con él.
Usar la película miss simpatía para analizar a bush es algo muuuuuuy poco serio.
Me alegra ver opiniones como las de Anónimo en el blog porque brindan la oportunidad de debatir con alguien que piensa muy distinto.
Para no extenderme demasiado, señalaré que coincido con la idea de que "la paz mundial" es un sueño. La realidad muestra que no existe tal cosa. La paz regional es posible y, de hecho, Latinoamérica ha estado bastante libre de guerras durante el siglo XX y es deseable y factible que continúe así.
Para ello, debe evitarse, y de producirse, condenarse un acto unilateral como el de Uribe al violar la soberanía de otro Estado aunque sea para perseguir a un tipo como Reyes que, para Colombia sin ninguna duda, es un terrorista.
El problemita que Anónimo no señala es que también debe evitarse, y eventualmente condenarse, que un Estado vecino dé refugio y ayuda a una organización armada que, por la razón ideológica o delictiva que sea, libra combates contra el Gobierno de otro país vecino con el que se mantienen relaciones diplomáticas y comerciales normales.
Tampoco ayuda a mantener la paz regional la INTERVENCION EN LOS ASUNTOS INTERNOS DE UN ESTADO por parte de otro Gobierno de la zona. Sin ir más lejos, las propias declaraciones públicas de Chávez reconociendo status de beligerante a las FARC constituyen una intervención inaceptable que rompe con la generalizada posición de los países latinoamericanos que no abren juicio acerca de si las FARC son o no un grupo terrorista, un grupo insurgente o una banda de narcotraficantes.
Para la UE y para EE.UU. son un grupo terrorista por las razones que ellos tendrán para así jusgarlo y que, en este caso, no me interesan porque no hacen a la cuestión de la paz regional latinoamericana. Pero en este contexto, es absolutamente legítimo que un gobierno apoye a otro que lucha contra el común enemigo terrorista. La ayuda de EE.UU. a Colombia está plenamente
legalizada desde el punto de vista del Derecho Internacional y, además, viene de antigua data cuando Bush no era Presidente de EE.UU.
Creer que a EE.UU. no le interesa la paz en Latinoamérica es una simpleza porque, en realidad, lo que le interesa poco es Latinoamérica en general SIEMPRE Y CUANDO NO HAYA EN LA REGIÓN UN CONFLICTO QUE EVENTUALMENTE AFECTE LA SEGURIDAD DE EE.UU.
Por otra parte, no creo que la paz en la región haya estado en peligro por la ilegal incursión colombiana en territorio ecuatoriano. Las razones que escribí oportunamente eran:
1) Chávez estaba haciendo un circo mediático para unificar la opinión pública venezolana y recuperar prestigio apelando al sentimiento patriótico frente a un posible conflicto.
2) Los generales venezolanos no podían ignorar que el Ejército colombiano era mucho más fuerte, veterano, mejor equipado y entrenado que el de Venezuela, además de que iba a tener la ayuda de EE.UU., por lo cual difícilmente se iban a arriesgar a ir a la guerra.
Por lo anterior, opiné que Chávez estaba blandiendo el sable pero que la sangre no llegaría al río.
El desplazamiento de tropas ecuatorianas que hizo Correa también fue "pour épater les bourgeoises" ya que el ejército ecuatoriano no mueve el amperímetro frente a Colombia.
Básicamente, no había voluntad de lucha en serio en ninguno de los eventuales beligerantes ya que Colombia no realizó ningún movimiento ni siquiera de respuesta a los movimientos militares de Ecuador y Venezuela.
La intervención de la OEA era lógica y necesaria para que todo el mundo involucrado pudiera salvar la cara mediante las respectivas disculpas o quejas, según el caso.
No quiero que se interprete que minimizo la voluntad de evitar un conflicto por parte de los demás países latinoamericanos sino que, simplemente, nunca hubo verdaderamente un peligro de guerra.
Para que Anónimo no crea que soy pro-Bush le aclaro que pienso que Bush y su entorno SON peligrosos para "la paz mundial", pero ya se va y, de todas maneras, no es el único peligroso en el mundo. Putin también es peligroso como lo demostrará en cuanto pueda.
No creo que EE.UU. sea una amenaza a la paz mundial ni regional sino que juega su rol de potencia hegemónica conforme sus intereses que no necesariamente van a coincidir con los míos.
Sí creo que un Presidente que brinda financiamiento a grupos armados, les dá refugio y ayuda y santuarios donde recuperarse u operar contra otro Estado ES PELIGROSO, aunque necesitemos su petróleo o sus dólares.
Por tanto, hay que manejarse con cuidado lo que no significa romper con él necesariamente.
Abran fuego, muchachos.
YO (el enmascarado)
Me parece que el primer comentarista lee demasiado Página/12...
TN
El resentimiento puede mover montañas.
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