3 de abril de 2008

Carta de lectores enviada

Hace bastante que no mando nada a los diarios. Recién escuché otra vez a la aprendiz de bruja hablando de "calidad institucional" y de una redacté esta carta que acabo de mandar a La Nación;

"Sr. Director:

En los últimos días la señora Presidente ha repetido y celebrado reiteradamente que la Argentina bajo su mandato construye una “verdadera calidad institucional”.
Sería interesante que para construirla en la realidad se diera participación en la discusión de tributos que exceden largamente el 33% considerado confiscatorio por la jurisprudencia argentina al Poder Legislativo, que en este proceso de “calidad” ha sido marginado por cuanto continúa vigente sine die la emergencia económica por la que le ha transferido facultades legislativas al Ejecutivo, en una acción que deja a los legisladores notablemente cerca de la infame traición a la Patria establecida en el artículo 29 del texto constitucional.


Sería también que en aras de encontrar esa pretendida calidad los diputados actuaran como representantes del pueblo de las provincias, y los senadores como representantes de las mismas, y no como sucede salvo honrosa y extrema excepción, como voceros del poder central y del partido o fracción que lo detenta.

Si estas mejoras sucedieran, si estos cambios fueran patentes y visibles, no dudaría en festejarlo y en adherirme al por ahora vano júbilo celebratorio de la Sra. Dra. Fernández de Kirchner. "

Me juego a que no sale.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente carta, ojalá publiquen.¿No le parece curioso que la presión e injusticia que produce y fomenta esta manada de corruptos a veces termine sacando lo mejor de nosotros?. Sé que la proporción es 1 a un millón inversa, en realidad. Generalmente sale lo peor de nosotros, pero a veces , se siente que alguno se acrisola como la plata,luego de ser sometida al fuego y eliminadas las impurezas.
Saludo cordial.
Jorge Peña

Anónimo dijo...

¿Dra?

Raúl

BlogBis dijo...

En la versión que fue por mail le eliminé lo de DRA. porque en realidad no hay pruebas de que lo sea. A cambio, yo firmo con mi título porque tengo el diploma disponible para quien lo quiera ver.

Peña, se agradece el elogio.