"Es muy fácil echar la culpa y decir «Fulano hizo esto» cuando no se ve cómo están viviendo, en la miseria, con esos chicos desnutridos. Entonces, ¡sacate un poco las pilchas y da una vuelta!".
Mensaje golpista dirigido a la (vi)Reina KK, desde una organización reconocidamente gorila como es Abuelas de Plaza de Mayo (filial Rosario). La que habló es Darwina Galicchio, que se hizo conocida por estar el domingo en el acto del Monumento. De paso, también hablo de los derechos humanos como fuente de ingresos:
"Las Abuelas y las Madres les chupan las medias al gobierno, perdón por el término, y de eso se saca tajada".
También le mandó besos a la Carlotto:
"Es una mujer que ha asimilado mucho una posición social. No era así cuando yo la conocí. Uno la busca y cuando no está en París, en la Torre Eiffel, está navegando por no sé dónde. Si me buscan a mí, estoy en la verdulería..."
Uno lee esto y cae en el error de pensar que a lo mejor en algún momento se cae la farsa. Pero creo que es ser demasiado ingenuo. A lo mejor la señora opina así convencida, o a lo mejor opina así porque como bien dice, apenas le mandan plata para las estampillas.
7 comentarios:
Yo creo que ven que el barco hace agua por todos lados y huyen como rata por tirante.
Ya le va a llegar el cheque y se va a callar la boca
Esa abuelita nunca va a recibir un Nobel de la Paz si sigue con esas declaraciones golpistas.
Cipaya! Traidora! Seguramente su hijo haya sido un delator de militantes!
Che que estemos enojados por la actutud de las madres en estos años no quita que sean personas que perdieron sus hijos a manos del terrorismo de estado
Y si una adopta una actitud coherente no podemos hacer mas que felicitarla que es eso de tratarla de rata o de que esta esperando el cheque son liberales solo en lo economico ustedes?
El que a hierro mata a hierro muere, dice el refrán.
La tolerancia es la virtud del hombre sin convicciones, dice Chesterton.
Parece que Bonafini y Carlotto tuvieron hijos terroristas que fueron muertos por fuerzas militares y no por eso ellas dejan de ser - en el mejor de los casos- ratas.
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