18 de julio de 2008

Lo'güiners y lo'lusers

Agustín en su siempre excelente blog arma un primer intento de listado de ganadores y perdedores después de ver el trámite parlamentario del proyecto oficial de avalar la 125.
Remarco el valor que tiene el Senado como ecualizador del peso de las provincias. En ese sentido creo que se cumplió totalmente el propósito que se le fijó en 1853. Tengo que repasar bien los votos para ver cómo funcionó el tercer senador, pero en cualquier caso es una figura que no tiene mucho gollete.
Un comentario adicional me merece el discurso de dos senadores, al que ayer muchísima gente me elogió. Uno, el de Chiche Duhalde, que sin pretender el vuelo intelectual de la quetejedi le calzó palazo tras palazo, sin irse por las nubes de Ubeda. Otro el del senador cordobés Rossi, que detalló con pelos y señales las consecuencias de la 125 en los pueblos y en la industri pampeana. No escuché exponer a Reutemann. Ah, y por cierto, no me puedo olvidar de Carlos Menem, un señor.

7 comentarios:

Louis Cyphre dijo...
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Agustin dijo...
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BlogBis dijo...

Disculpen Luis y Agustín, pero prefiero borrar ambos comentarios.

Agustin dijo...

Bien hecho, BlogBis. Admito que me excedí. A todos nos pasa alguna vez. Sorry & Saludos,

Agustin.

Louis Cyphre dijo...

¿Qué pasó?

Claude dijo...

Menem estuvo muy bien, y firme, lejos de la imagen gagá que la prensa vive inventándole.

Anónimo dijo...

No es santo de mi devoción, pero lo de Menem fue decididamente formidable. A la edad que tiene, con una neumonía galopante (los que estábamos presentes bromeábamos "voten rápido que se nos muere Menem"), hizo una intervención de 20 minutos, en medio de un silencio cuasi sepulcral, mientras desde el Salón Illia se escuchaban los chiflidos de la turba K, y les pasó un par de facturas a los K. Me hubiera gustado estar en los zapatos de Pichetto, primer menemista en otras épocas (Según Morales, el jefe de la bancada oficialista es uno de los senadores que bajo en un plato volador en el 2002)para saber en qué huevo caía la patada, izquierdo o derecho.
El otro discurso que estuvo bárbaro fue el de Rodríguez Saa (tampoco lo quiero mucho, aclaro), que con una oratoria impecable les dio una clase de peronismo a los actuales dueños del partido.
Corresponsal para BlogBis desde el Congreso de la Nación