Los Kirchner consumieron ya todos sus cartuchos en apenas 8 meses de gobierno.
Se agotó el margen de maniobra que mantuvo Néstor Kirchner durante 4 años.
El apoyo al gobierno en Diputados quedó mermado a una ajustada mayoría. En los próximos proyectos va a ser difícil mantenerla.
Kichner tuvo que salir de su armario autoritario y dar la cara para lograr el apoyo necesario en Diputados. Ahora ya no podrá volver a ocultarse y su estilo déspota quedó al descubierto.
La oposición dio otro paso hacia una futura consolidación para enfrentar el menguante poder de los Kichner.
La victoria puntual en Diputados no logra ocultar la profunda división que se produjo en el seno del partido peronista.
Las elecciones de 2009 van a dar el golpe de gracia al poder kirchnerista.
Todavía falta la aprobación por parte del Senado.
4 comentarios:
Jorge, excelente análisis.
Para mi es claro que ganaron una batalla de una guerra perdida. La mezquindad puede hacerles sentir que es suficiente, pero la legitimidad se les fue a los caños. Perdieron por el lado afectivo en la gente, y eso aca se paga, es mucho mas importante que hacer las cosas bien.
TODAVIA PUEDEN Y VAN A HACER MUCHO MAS DAÑO ANTES DE IRSE
Me parece que no hay que competir y ver "quien la tiene más larga", digo, esto no es cuetión de una lucha de poderes y de ver quien gana. Sino que lo que hay que replantearse es que decisión será mejor para el país.. Y cuando digo el país hablo de todos los ciudadanos que habitamos en el suelo Argentino. Ya sea ricos, pobres indigentes o millonarios (como nuetros compañeros ruralistas)..
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