Cuánto hace que la gente que se dedica en serio a estudiar el tema de la droga y las adicciones viene diciendo que en los cinturones de pobreza de las ciudades argentinas se estaba gestando un sistema similar al de las favelas cariocas ¿15, 20 años?
Parece que ya estamos ahí, aunque desde el gobierno´se festeje de manera cómplice que el 75% del consumo es recreativo.
El que no crea que la cosa está tan mal, que vea sólo esta frase:
"Mi mamá me dio 50 pesos para que le pegue un tiro a ese pibe porque le había robado droga"
El "sicario" tiene 17 años, la víctima 14. Queda claro?
7 comentarios:
Rubén, si las drogas fuesen legales, las llamadas disputas por merca no existirían.
Además, esto que describís no es nada nuevo, hace muchos años que se viene dando.
Andrés
Obviamente que lo que cuento hace rato que se da. Acá en Rosario incluso hubo (o hay, no sé) una guerra entre dos familias narcovilleras, que dejó un tendal de muertos en un par de años.
Pero se lo toma como una nota de color, casi.
No estoy seguro que la legalización sea el camino para evitar la violencia asociada a la falopa. Legalizá el paco, y decime si el hecho de que se lo pueda comprar en el shopping va a evitar que un fierita limado te amasije por dos pesitos para el toque.
la que se beneficiaría de una legalización podrá ser la clase media y alta, no la villa.
Rubén, con la legalización de las drogas yo apunto más que nada a terminar con la violencia asociada a la prohibición de drogas, no tanto a combatir el consumo. ¿O acaso hay una violencia asociada al tráfico de alcohol? No, porque no está prohibido, aún cuando su consumo sea alto.
Incluso con la legalización de las drogas se podría controlar su proceso de producción para mejorar su calidad y para evitar que existan sustancias de pésima calidad, como los residuos de la pasta base de cocaína, o "paco".
Andrés
Andrés, en teoría.
Porque al prohibir el paco, estarías creando (maneniendo) el mercado negro ilegal de paco.
Sine metu, aunque pongamos una prohibición, sustancias tóxicas como el "paco" van a seguir existiendo. El tema es que con la ilegalización de las drogas, la producción de las mismas no puede controlarse; al contrario de lo que sucede con el alcohol. No te olvides que durante la llamada Ley Seca en EE.UU., al no poder controlarse la producción de bebidas alcohólicas por la prohibición, el solo hecho de tomar alcohol se hizo peligroso y es más: la ilegalización incrementó el consumo, no lo bajó.
Si el Estado pretende que 40 millones de personas no se drogen, para controlar eso, estaríamos experimentando una versión peligrosísima del Gran Hermano (no el reality).
Andrés
Andrés, de acuerdo.
Sólo pretendía mostrar que la legalización no es la panacea.
La libertad siempre conlleva responsabilidad.
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