11 de octubre de 2008

United Nations


El representante de Israel ante las Naciones Unidas: - 'Antes de empezar mi discurso querría contarles algo sobre Moisés: Cuando Moisés golpeó la roca y de ella salió agua, pensó: 'Qué buena oportunidad para darme un baño'. Se quitó la ropa, la dejó junto a la roca y entró al agua.
Cuando acabó y quiso vestirse, su ropa no estaba allí. Se la habían robado los palestinos.'

El representante de Palestina saltó furioso y dijo: '¡¿¿Qué dice??!!!- ¡Si los palestinos no estaban allí entonces!!!'.

El representante de Israel sonrió y dijo: 'Y ahora que esto ha quedado bien claro, comenzaré mi discurso'

34 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo del israelí tiene tanto valor como el reclamo de los pueblos originarios americanos...No jodamos.

David

Cogito Argentum dijo...

cual es el reclamo israeli, podes decirnos?

Cogito Argentum dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Vos citá la fuente de donde sacaron eso y te digo qué reclamo.

David

Anónimo dijo...

Ah te referis a los pueblos americanos.
El reclamo de los pueblos originarios americanos es que les devuelvan las tierras americanas porque se las usurparon los colonizadores hace 500 años.

David

Rāḥēl Reznik dijo...

Los políticos de hoy en día, en Israel y en el mundo, 'adolecen' como los jóvenes y su ingenuidad pasa a ser un peligro letal para el mundo occidental. Conocer la mentalidad del enemigo es un deber y no se pueden dar el lujo de ser cándidos y crédulos frente al fanatismo del Islam integrista.
La tan mentada política de pacificación solo lleva a Occidente a una perdida de tiempo inútil. El tiempo en esta guerra es fundamental porque justamente ellos necesitan 'tiempo' para armarse, rearmarse y proseguir la carrera hacia su meta: 'gobernar al mundo'. El fundamentalismo islámico no busca la paz. El Islam quiere adueñarse de todos y cada uno de nosotros, de nuestras voluntades, nuestra libertad y hasta de nuestros pensamientos. Y no es con la pacificación que le ofrece Occidente que lograremos derrotarlos. La maquinaria para llegar al 'gran califato' está en marcha. Los grandes intereses de las potencias que venden armas pueden llevar a la destrucción del mundo aunque surjan mentes esclarecidas denunciando el problema.
Israel es el gran escudo de Occidente. Quienes atacan a Israel atacan su propia seguridad. Son los judeofobos, la izquierda progre, acorde a sus intereses, los intelectuales, seculares y teocráticos, juntos. Ellos se unen en un punto común: atacar a Israel y a los judíos. No se dan cuenta que nosotros ya tenemos capacidad defensiva contra el terror como no lo tiene nadie. Defender a Israel es defender a Occidente y en eso estamos.
Los palestinos no quieren la paz. Nunca la quisieron. Salvo que les entreguemos envuelto en papel de seda y cintas el Estado de Israel. Me pregunto que hicieron ellos para merecerse un país como el que tenemos. Cuanto investigaron, desarrollaron, pensaron y cuanto ofrecieron al mundo en estos últimos 60 años?
Arafat nunca quiso la paz y lo demostró pegando el portazo en Oslo cuando le ofrecieron casi todo lo que pedía. Es mas, Oslo fue uno de los tantos fracasos de nuestros políticos israelíes. Y a la vista está, por más que la izquierda israelí siga pensando en peces de colores.
Israel quiere negociar lo innegociable en un momento en que no hay con quien negociar. Y dudo que por mucho tiempo lo haya. Hablamos de paz. Pero… no seamos ingenuos… ¿Con quiénes? Si alguno de ellos quiere la paz las presiones de los grupos islámicos no se lo permiten. No quieren paz porque se les cortaría el gran negocio que hacen lucrando con el terror. No recibirían la 'ayuda' internacional que permanentemente llena sus bolsillos. Porque…hablemos claro: ese dinero no va para el pueblo…ese dinero es para sus cuentas bancarias engrosadas por la estupidez de Occidente y aun los mismos países árabes que los financian.
Mientras tanto... los palestinos siguen muriéndose de hambre y hacinados en campamentos miserables. ¿Y quién tiene la culpa de ello? Israel. Si Israel no existiera igual se matarían entre ellos como lo están haciendo. Hamas contra Fatah, sunies contra chiies, Al Qaeda (suni) contra Hisballah (chii). Ahora la orden es no ir a Siria porque es peligroso (cuando todo el armamento de Hisballah pasó por Siria cuya ambición de adueñarse del Líbano sigue firme)
No aceptan la paz de Olmert. Ni aceptaran la de Livni ni la de nadie. Nunca van a aceptar nada. No les interesa la paz. No les conviene tampoco, salvo treguas de no más de diez años para rearmarse. Esa es la 'hudna'. Israel tiene que ser destruido y así como 'esa' era la idea de Arafat hoy es la misma idea de Hamas, de Abu Mazen, de Hisbollah y de toda la gente que los apoya. Los moderados palestinos ni son moderados ni quieren la paz. Creer en eso es una ingenuidad que no nos podemos permitir porque es un arma tan letal para nuestra seguridad como lo puede ser la bomba nuclear que Irán quiere tirarnos para destruirnos.
Olmert lo usaba de cortina de humo e igual lo hace Abu Mazen ante la presión tanto de los grupos armados como de la comunidad internacional. No creo en utopías. Esta generación de palestinos no esta siquiera preparada para la paz. Acaso: ¿Podrían formar un gobierno que resuelva sus problemas? Solo les enseñan la cultura de la muerte y los estudiantes palestinos que estudian en Israel, que son muchos, no quieren asumir la responsabilidad de participar con los grupos armados atrás. Si ellos educaran a su gente para la paz pueda ser que en una o dos generaciones eso pueda suceder. Mientras tanto hablar de paz con cualquiera de ellos es tan inútil como pretender que un político diga la verdad.

Dori Lustron

Anónimo dijo...

Lo que a mi no me parece una jugada inteligente es poner a Rusia del lado de Irán. Creo que USA tiene intenciones imperialistas que entorpecen la solución del problema real que es el terrorismo islámico. Demonizar a los rusos solo hace que la jihad tenga un aliado fuerte.
Lo de Georgia fue una estupidez.
A vos qué te parece Raquel?

David

Anónimo dijo...

¿que es el 'gran califato'? ¿La version con el cuento de 'Los protocolos de Sion' aplicado a los musulmanes?

super dijo...

Anónimo, si además de la condorito, lees algun libro de historia, vas a ver que la Cristiandad combatió al Islam desde tiempos inmemoriales. Fijate como estuvo sitiada Europa en el siglo XIII.
Ya en el siglo XI los musulmanes conquistaron media España. El nombre Andalucía se lo pusieron los musulmanes!

No es moco de pavo...

super dijo...

A propósito, documentate sobre el Califato de Córdoba.

Anónimo dijo...

Lo de los palestinos tiene tanto valor como el reclamo de los pueblos originarios americanos...No jodas.

Anónimo dijo...

...en realidad, mucho menos...

Anónimo dijo...

Mi primer comentario apunta a mostrar que politicamente el recurso a remontarse a la epoca de Moises no tiene mucho peso.
Prefiero que seamos más directos. El terrorismo Islámico es claro y visible.
En cambio, lo de Moises dá para pasarse discutiendo por horas al pedo.

David

Carlos dijo...

Coincido en un todo con el comentario de Raquel. Los musulmanes en general y los palestinos en particular no quieren la paz. Lo único que puede frenarlos es un Israel fuerte y temible.
Acá un artículo interesante, como siempre de
de Caroline Glick.

Rāḥēl Reznik dijo...

Si no existiera Israel tampoco existiría Palestina ya que Siria y Egipto se repartirían la tierra entre ellos y no permitirían nunca un estado palestino.
Jordania también pediría su tajada, y los 'hermanitos' árabes terminarían liquidándolos a todos.
Porque ni siquiera se entienden entre ellos mismos.
Gaza se llenó de terroristas cuando fue la desconexión.
Y nada hace suponer que será diferente si se entrega Cisjordania.
Entonces tendremos los misiles en Tel Aviv.

Anónimo dijo...

Carlos tu lectura de la historia es muy particular. Tan particular que carece de seriedad. Por favor no intentes dar clases de la misma porque aqui somos todos grandecitos y con mas de un par de libros leidos. Guarda esa actitud para tus hijos y nietos

Anónimo dijo...

"Carlos tu lectura de la historia es muy particular. Tan particular que carece de seriedad. Por favor no intentes dar clases de la misma porque aqui somos todos grandecitos y con mas de un par de libros leidos. Guarda esa actitud para tus hijos y nietos"
??
Dijo que estaba de acuerdo con el artículo de Raquel.
Amigo, si vas a pelear por lo menos poné el nombre.

David

super dijo...

Supongo que se refiere a mi.
Yo hablaba del imperio otomano.

http://es.wikipedia.org/wiki/Imperio_Otomano

Supongo que no lo inventé.

Anónimo dijo...

David el articulo de raquel es solo la opinion de una persona. Nada tiene que ver con la verdad, con algun grado de consenso. Mira lo que dicen otros judios:

Anónimo dijo...

IJAN International Jewish Antizionist Network

Somos una red internacional de judíos incondicionalmente comprometidos con las luchas de emancipación humana, de las cuales la liberación de los habitantes de Palestina y de su tierra es una parte primordial. Nuestro compromiso es el desmantelamiento del apartheid israelí, el retorno de los refugiados palestinos, y el fin de la colonización israelí de la Palestina histórica.

Desde Polonia hasta Iraq, desde Argentina hasta Sudáfrica, desde Brooklyn hasta Mississippi, judíos fueron parte en la búsqueda de justicia, manifestando su deseo por un mundo más justo, participando con otros en luchas colectivas. Judíos participaron prominentemente en la lucha de los trabajadores durante la depresión americana, en el movimiento de los derechos civiles, en la lucha en contra del apartheid sudafricano, en la lucha contra el fascismo en Europa y en muchos otros movimientos por el cambio social y político. La histórica y progresiva limpieza étnica de la población palestina de sus tierras por parte del Estado de Israel contradice y traiciona esta larga historia de participación judía en luchas de liberación colectivas.

El sionismo -la ideología fundadora que se manifiesta actualmente en el Estado de Israel- echó raíces en la era del colonialismo europeo y se diseminó a continuación del genocidio Nazi. El sionismo se nutrió de los más violentos y opresivos hechos del siglo diecinueve, limando los numerosos esfuerzos de una militancia de judíos en las luchas de liberación. Honrando estas luchas y para retomar un lugar en los vibrantes movimientos populares de nuestro tiempo, el sionismo, en todas sus formas, debe ser abandonado.

Esto es crucial, primero que nada, por su impacto en los habitantes de Palestina y el resto de la región. El sionismo también deshonra la persecución y el genocidio de los judíos europeos al usar su memoria para justificar y perpetuar el racismo y colonialismo europeos. El sionismo es responsable por el extenso desplazamiento y alienación de los judíos mizrahi (judíos de ascendencia africana y asiática) de sus diversas historias, idiomas, tradiciones y culturas. Los judíos mizrahi tienen una historia en esta región de más de 2.000 años. Mientras el sionismo se arraigaba, estas historias fueron interrumpidas de su propio devenir en pos de la segregación de los judíos impuesta por el Estado de Israel.

Como tal, el sionismo nos implica en la opresión del pueblo palestino y en la denigración de nuestras propias tradiciones, luchas por la justicia y alianzas con nuestro prójimo.

Nos comprometemos a: Oponernos al sionismo y al Estado de Israel

El sionismo es racista. Demanda poder político, económico y legal para las personas y culturas judías y europeas por encima de los pueblos y las culturas autóctonas. El sionismo no solo es racista sino antisemita. Respalda la imaginería antisemita europea y sexista del "judío diaspórico" afeminado y débil y contrapone a éste un "judío nuevo" violento y militarizado, que es un perpetrador y no una víctima de la violencia racializada.

El sionismo por lo tanto busca convertir a los judíos en blancos, a través de la adopción del racismo blanco en contra del pueblo palestino. A pesar de la necesidad de Israel de integrar a los mizrahi para mantener una mayoría judía, este racismo también se manifiesta en la marginación y la explotación económica de la población mizrahi socialmente pobre. Esta violencia racializada también incluye la explotación de los trabajadores migratorios.

Los sionistas diseminan el mito de que Israel es una democracia. En realidad, el Estado de Israel ha establecido e implementado prácticas y políticas internas de discriminación contra los judíos de ascendencia mizrahi y excluye y restringe a los palestinos. Además, el Estado de Israel, en colaboración con los Estados Unidos, socava cualquier movimiento árabe por la liberación y el cambio social.

El sionismo perpetúa el excepcionalismo judío. Para defender sus crímenes, el sionismo cuenta una versión de la historia judía que está desconectada de la historia y las experiencias de otras personas. Promueve la narrativa del holocausto nazi como excepcional en la historia de la humanidad - a pesar de ser uno de muchos holocaustos, desde los aborígenes estadounidenses hasta Armenia y Ruanda. El sionismo separa a los judíos de las víctimas y los sobrevivientes de otros genocidios en lugar de unirnos a ellos.

A través de una islamofobia compartida y un deseo de controlar a Medio Oriente y Asia occidental, el Estado de Israel hace causa común con los cristianos fundamentalistas y otros que llaman a la destrucción de los judíos. Juntos, llaman a la persecución de musulmanes. Esta promoción conjunta de islamofobia sirve para demonizar a la resistencia contra la dominación económica y militar de occidente. Continúa una larga historia de colusión con regímenes represivos y violentos, desde Alemania nazi hasta el régimen de apartheid de Sudáfrica y las dictaduras reaccionarias a lo largo de Latinoamérica.

El sionismo sostiene que la seguridad judía depende de un estado judío altamente militarizado. Pero el Estado de Israel no contribuye a que los judíos estén seguros. Su violencia garantiza inestabilidad y miedo para los que están dentro de su esfera de influencia y pone en peligro la seguridad de todas las personas, incluyendo a los judíos, mucho más allá de sus fronteras. El sionismo voluntariamente coludió para crear las condiciones que llevaron a la violencia en contra de los judíos en los países árabes. El odio que la violencia y dominación militar israelíes generan hacia los judíos que viven en Israel y en otros lugares es usado para justificar más violencia sionista.

Nos comprometemos a: Rechazar el legado colonial y su expansión progresiva

En el momento en que el movimiento sionista decidió construir un Estado judío en Palestina, se convirtió en un movimiento de conquista. Al igual que las conquistas imperiales y las ideologías genocidas de las Américas o de África, el sionismo conlleva la segregación entre las personas, la confiscación de la tierra, la limpieza étnica y la implacable violencia militar.

Los sionistas trabajaron de común acuerdo con la administración colonial británica en contra de los habitantes originarios de la región y sus legítimas esperanzas de libertad y autodeterminación. El imaginario sionista de una Palestina "vacía" y desolada justificó la destrucción de la vida palestina tal como anteriormente ese racismo justificó la exterminación de los autóctonos estadounidenses, el tráfico transatlántico de esclavos y muchas otras atrocidades.

Desde la progresiva expansión de las colonias hasta la construcción del Muro del Apartheid israelí, el compromiso con la dominación colonial del Estado de Israel imprime su marca de destrucción ambiental y del paisaje físico de Palestina. Ante la falla de sus políticas para acabar con la resistencia palestina el Estado de Israel ataca con más y más violencia con políticas que, cuando son llevadas a su máxima expresión, apuntan al genocidio. En Gaza, el estado israelí impide el acceso a la comida, al agua, electricidad, ayuda humanitaria y suministros médicos como un arma dirigida a las bases mismas de la vida humana.

El Estado de Israel, que una vez fue vehículo para el ataque británico y francés contra la unidad y la independencia árabes, actualmente es el socio más joven en la estrategia de los Estados Unidos y sus aliados por el control militar, económico y político, de dominación, específicamente de la región estratégica de Medio Oriente / Sudoeste Asiático. El peligro de una guerra nuclear a través de un ataque estadounidense/israelí contra Irán nos recuerda que el estado de Israel es una bomba atómica que debe ser desmantelada urgentemente para salvar las vidas de todas sus víctimas actuales y potenciales.

Nos comprometemos a: Desafiar a las organizaciones sionistas

Más allá de concretar la creación del Estado de Israel, el sionismo determinó su política internacional de antagonismo y dominación militar hacia sus vecinos y estableció una sofisticada red global de organizaciones, grupos de presión política, empresas de relaciones públicas, clubes en universidades y escuelas para perpetuar las ideas sionistas en las comunidades judías y el público en general.

Miles de millones de dólares americanos fluyen anualmente hacia el Estado de Israel para sostener la ocupación y su ejército sofisticado y brutal. La máquina de guerra que financian lidera la industria global de armas, mengua los recursos ansiados por un mundo que desesperadamente necesita agua, comida, asistencia médica, vivienda y educación. Europa, Canadá y las Naciones Unidas, mientras tanto, apoyan la infraestructura de ocupación bajo el disfraz de ayuda humanitaria para la población palestina. Juntos, los EEUU y sus aliados, cooperan para hacer más profunda la dominación de la región y acabar con los movimientos populares.

Una red internacional de instituciones y organizaciones sionistas apoya los asentamientos judíos militares y militantes con fondos directos. Estas organizaciones también proporcionan el apoyo político necesario para legitimar y promover políticas y programas de ayuda. En cada país, estas organizaciones censuran las críticas a Israel y tienen en la mira a personas y organizaciones a través de listas negras, violencia, vandalismo, encarcelamiento, deportación, despidos y otras privaciones económicas.

Estas organizaciones facilitan la difusión de la islamofobia. Tocan los tambores de guerra en el exterior mientras presionan por una legislación represiva en sus países. En Estados Unidos y Canadá, las organizaciones sionistas ayudaron a promover la legislación "anti-terrorista" convirtiendo todo esfuerzo organizado para apoyar al boicot, retiro de inversiones y sanciones contra el Estado de Israel, o para apoyar organizaciones palestinas, iraníes, iraquíes, libanesas y musulmanas, en sujetos a perseguir acusándolos de ayudar al terrorismo y cometer traición. Tanto en Europa como en EEUU, organizaciones supuestamente "judías" son las primeras en ejercer presión para entrar en guerra con Irán.

Están apareciendo fisuras en el edificio del sionismo así como en la dominación mundial misma de los Estados Unidos. En la región, la resistencia extraordinaria por parte de Palestina y Sur de Líbano en contra de la agresión y ocupación israelí y estadounidense sigue en pie, a pesar de los recursos limitados y muchas traiciones. El movimiento de solidaridad con el pueblo de Palestina y la confrontación con la política de los Estados Unidos e Israel está cobrando ímpetu en el mundo. En Israel, este ímpetu lo vemos en el disentimiento creciente, que favorece las condiciones para retomar dos legados de los años '60: Matzpen, una organización israelí palestina y antisionista judía y el Partido Mizrahi Panteras Negras. Podemos agregar un creciente rechazo por parte de los jóvenes a participar en la conscripción obligatoria del ejército.

Dentro de los gobiernos y las discusiones públicas en los Estados Unidos y Europa, el costo del apoyo incondicional hacia el estado de Israel está siendo cuestionado cada vez más. Israel y EEUU buscan nuevos aliados en el sur global para que se unan a sus conquistas económicas y militares. La relación creciente entre Israel y la India es un ejemplo sombrío de esto. Al compartir un interés en el control político y la ganancia de capital para unos pocos a expensas de muchos, la elite en India y las de Asia Occidental y Medio Oriente, se hallan en connivencia con la economía y la agenda militar occidental en la región.

La propaganda de la guerra global occidental contra el terror repercute en la islamofobia y es requerida y promovida por la elite india; Aprovecha esta oportunidad para reprimir severamente la disensión en regímenes de Medio Oriente así como Asia del sur y Asia occidental. No obstante, surgen levantamientos populares basados en las ricas historias de lucha anticolonial desafiando, y en última instancia, derrocando esta alianza.

Junto con nuestros aliados, intentamos contribuir a ampliar esas fisuras, hasta que el muro caiga y el Estado de Israel sea aislado como lo fue Sudáfrica durante el apartheid. Prometemos emprender la batalla en contra de estas organizaciones que pretenden hablar por nosotros y derrotarlas.

Nos comprometemos a: Extender nuestra solidaridad y nuestro trabajo por la justicia

Comprometemos nuestros corazones, nuestras mentes y nuestras energías políticas para apoyar al movimiento vibrante y diverso de resistencia del pueblo palestino y a enfrentar las injusticias de las cuales los países donde vivimos son responsables.

Apoyamos inequívocamente el derecho de retorno palestino. Llamamos al desmantelamiento de la ley israelí racista del retorno que privilegia los derechos de cualquier persona que el Estado de Israel estima como "judía" para establecerse en Palestina, mientras que excluye a los palestinos y los convierte en refugiados.

Respondemos sin reservas al llamado de Palestina al boicot, retiro de inversiones y sanciones contra el Estado de Israel.

Apoyamos la exigencia de la liberación de los presos políticos palestinos y de acabar con los encarcelamientos de líderes políticos, mujeres, niños y adultos palestinos como método de control y terror.

No es nuestra tarea prescribir el camino que el pueblo palestino debe tomar para definir su futuro. No pretendemos sustituir nuestras voces por las de ellos. Nuestras estrategias y acciones surgirán de nuestras relaciones activas con quienes están involucrados en la gama de luchas de liberación dentro de Palestina y en el resto de la región. Apoyaremos su lucha por sobrevivir, mantenerse firme y avanzar en su movimiento lo mejor que puedan, en sus propios términos.

Somos copartícipes de los vibrantes movimientos populares de resistencia de nuestro tiempo que defienden y enaltecen las vidas de todas las personas y la del planeta mismo. Somos copartícipes de los movimientos que lideran los más afectados por la conquista del imperio, la ocupación, el racismo, el control y la explotación global de personas y recursos. Defendemos la protección del mundo natural. Defendemos los derechos de los pueblos autóctonos a sus tierras y a su soberanía.

Defendemos los derechos de los inmigrantes y refugiados a la libre circulación y seguridad a través de las fronteras. Defendemos los derechos de los trabajadores - incluyendo a los trabajadores inmigrantes introducidos en Israel para reemplazar tanto la mano de obra palestina como la mizrahi - a la justicia económica y a la auto-determinación. Defendemos los derechos a la justicia racial y a la expresión cultural. Defendemos los derechos de las mujeres y los niños y de todos los grupos explotados a ser libres de subyugación. Y defendemos los derechos universales al agua, a la alimentación, la vivienda, la educación, los servicios de salud y a vivir sin violencia - la única base sobre la cual la sociedad humana puede sobrevivir y florecer.

Nos comprometemos a apoyar la justicia para curar las heridas ocasionadas por la imposición y el funcionamiento de la dominación colonial en Palestina y en el resto de la región; los traumas de la opresión europea de judíos que el proyecto sionista está explotando; los miedos y privaciones sufridas a través de años de derramamiento de sangre; las manipulaciones de la cultura y los recursos usados para explotar a los judíos mizrahi y para separarlos de los palestinos; y la progresiva masacre, violación y despojo del pueblo palestino.

La justicia por la que trabajamos debe ser construida por todos a lo largo de Palestina, incluyendo Israel y por los refugiados palestinos, cuya lucha por su autodeterminación puede llevar a la igualdad y la libertad de todos los que viven allí y en las tierras circundantes.

Te llamamos para que te unas a nosotros

Estas promesas requieren la construcción de un movimiento judío internacional unido que desafíe al sionismo y su pretensión de hablar en nombre de todos nosotros. Ante un adversario internacional, no es suficiente trabajar localmente, o incluso nacionalmente. Debemos encontrar formas para trabajar juntos a través de fronteras, distancias, sectores e idiomas. Existe la posibilidad para muchas iniciativas y organizaciones, establecidas y nuevas, para trabajar independientemente y conjuntamente, en apoyo y colaboración mutuas.

¿Estás en contra del racismo en todas sus formas?

Entonces te llamamos para que te unas a nosotros para acabar con el apartheid israelí.

¿Apoyas la soberanía y los derechos a sus tierras de los pueblos autóctonos?

Entonces te llamamos para que te unas a nosotros en la defensa de la soberanía y los derechos de los palestinos a sus tierras.

¿Crees que todas nuestras vidas dependen de la sustentabilidad económica y ambiental? ¿Te enfurece el robo y la destrucción de los recursos del planeta?

Entonces te llamamos para que te unas a nosotros para detener la destrucción de la agricultura y la tierra palestina, su robo y el del agua y la destrucción de sus aldeas y plantaciones.

¿Buscas terminar con las guerras infinitas por el petróleo y la dominación de los Estados Unidos y sus aliados? ¿Quieres terminar con las culturas militarizadas, la conscripción de nuestros jóvenes y el saqueo de recursos para financiar ejércitos en lugar de las necesidades de la vida?

Entonces te llamamos para que te unas a nosotros para desmantelar una pieza decisiva de la maquinaria de guerra global.

¿Deseas desvincularte de la limpieza étnica de Palestina por parte del Estado de Israel y de la destrucción de la historia, la cultura y su autogobierno? ¿Crees que no hay paz sin justicia? ¿Te enfurece y te entristece que el holocausto judío esté siendo usado para perpetrar otras atrocidades?

Entonces te llamamos para que te unas a nosotros para terminar con el colonialismo sionista.

Para que todas las personas del planeta vivan con seguridad, justicia y paz, el proyecto colonial Israelí debe llegar a su fin. Nosotros jubilosamente asumimos esta tarea colectiva de socavar un sistema de conquista y saqueo que ha atormentado a nuestro mundo desde hace demasiado tiempo.

Sito web : http://www.ijsn.net/

Rāḥēl Reznik dijo...

¿El IJAN tiene algo que ver con la verdad, o con algún grado de consenso?
Esa gente miente descaradamente, son extremistas que van después a darse besitos con el Almeja que vive amenzando con hacer desaparecer al estado de Israel.

¿Quién sos, Mercedes Sosa?

Anónimo dijo...

El ignorante culposo del IJAN quiere pintar al sionismo como si fuese de "derecha".
En realidad sabe que el sionismo viene por ambas manos, pero como ahora las papas queman y tiene miedo de ligarla, se lava las manos. Claro, debe preferir vivir cómodo en algun pais tranquilo viviendo de la teta de algun organismo de derechos humanos.

David

Anónimo dijo...

Si un pueblo que se dice descender genéticamente de los semitas hebreos de por sí tiene "derecho" en el siglo XX a establecer un estado después de casi 1900 años de haberlo perdido (1), desplazando a quienes fuese que habitaran allí, entonces los Reyes de España aún tendrían un derecho "inclaudicable" a reclamar toda América sin importar la opinión de los americanos. Es decir, no habría ningún tipo de garantía jurídica y estamos hablando del siglo XX no ya de una conquista territorial del siglo XIX o XVIII.
En en siglo XX Palestina estaba gobernada por Gran Bretaña. Ésta supuestamente iba a abandonar la ocupación y habría acordado ayudar a los árabes a formar una nación, pero en vez de eso se encontraron con el Estado de Israel sin mediar ninguna consulta. Repito, en pleno siglo XX. Si me equivoco, pido perdón, pero creo que allí radica el quid de la cuestión.
Marcelo

(1) Tomo como referencia el año 70 de la caída de Jerusalén.

Rāḥēl Reznik dijo...

Como no tenés ni idea de lo que estás hablando, solo te diré que no solo que tuvimos 'derecho' sino que 'lo hicimos', y que creamos un país formidable que es la luz del mundo.
Y a mucha gente -como vos- les gustaría destruirnos, pero se van a desilusionar, porque no podrán, nunca.

Lo que sucede es muy simple: a vos te envenenaron el pozo.

Anónimo dijo...

y que creamos un país formidable que es la luz del mundo.
Te saltó la ficha mesiánica, jaja.
Todo bien, para mi también Israel es el Mesías esperado.

David

Anónimo dijo...

Como la luz del mundo??

sergio

BlogBis dijo...

Se me paso el brutal copypasteo de un par de comentarios atrás. De haberlo notado a tiempo lo hubiera eliminado. El que quiera armar un sitio de opinión, hagalo con blogger, no en BlogBis

Anónimo dijo...

En serio, no entiendo lo de la luz del mundo...

sergio

Anónimo dijo...

"Ya en el siglo XI los musulmanes conquistaron media España..."

Impresionante ignorancia. Que fuera en el siglo VIII y que llegaran hasta Gijón y Nimes (entonces parte del reino godo) no tiene la mayor importancia.

super dijo...

Bazán, me impresiona tu impresión. No porque tengas razón, sino por tu rabioso odio hacia los peronistas.
Decis "que fuera en el siglo VIII", como si yo estuviera diciendo que todo comenzó en el siglo XI, cuando a lo que me referí fue al estado de la penísula en aquel siglo XI, en que la Cristiandad decide emprender las Cruzadas contra el Islam.
Es más todavía, me llama la atención tu afirmación de que "fue en el VIII", como si hubiese sido un combate de 1 siglo, cuando fueron 8 siglos de combate contra los moros, que se resolvió a fines del siglo XV.
No comenté en ánimo de entrar en eruditas y estériles polémicas académicas, sino llamar la anteción sobre el peligro del enemigo Mahometano y resaltar los VARIOS SIGLOS de lucha que libró la Cristiandad contra el salvaje moro.

Anónimo dijo...

carlos perón, lo que decís parece un discurso peronista. Dejate de joder!

Lenin

Anónimo dijo...

Carlos,
A Andalucía no la bautizaron los musulmanes, sino los Vándalos ("Vandalucía" era el nombre original) cuando se establecieron en esa región en el siglo 3 o 4 d.c... es decir varios cientos de años antes del nacimento de Mahoma, y por lo tanto de los musulmanes.

Más allá de como bien dijo uno arriba, algunos argumentos pro israelíes de este thread son calcaditos de las paparruchadas de los Protocolos de los Sabios de Sion, o del más rancio mesianismo, si van a inventar teorías que parezcan más serias, señores.

Javier.-

Anónimo dijo...

Javier:
Pero los protocolos de Sion no son antision??

Ernesto

super dijo...

Estimado Javier:
Le agradezco su generosidad de espiritu que, al parecerle mi comentario sobre Andalucía desprovisto de verdad, no dudo en ofrecer su sabidura para aplacar la aparente pobreza del mismo. Pero quiero decirle, que si bien se lo agradezco, no puedo aceptarlo, puesto que sería deshonesto no decirle que el equívoco viene de su parte y no de la mía. Andalucía era territorio de Vándalos, como usted bien sabe precisar, pero no fue bautizada por estos sino por por los musulmanes en el siglo XIII que la nombraron "andaluyiza" y luego se castellanizó.
Nuevamente le agradezco su magnanimidad y me despido con un cordial saludo.