21 de enero de 2009

Hito



La onda de reivindicación racial que se veía ayer en Washington durante la asunción de Barcak Obama me pareció sobradamente demagógico. Se parecía a las imágenes de los argentinos humildes vivando a Eva Perón en los años '40.

Estoy de acuerdo con que Estados Unidos cumplió un hito ayer al asumir como presidente una persona "de color", "negra" o como le quieran llamar.

Eso sí, salvemos el caso de que Barack Obama no tiene en absoluto nada que ver con los esclavos africanos cuyos descendientes ahora lo vitorean.

De todos modos el caso es que la tez del presidente yanquee ahora es oscura y eso es algo que vale para muchos, y lo respeto, aunque no deja de tener tintes racistas.

Pero bueno, ya está. El problema con este hito "anti racista" es que se vive una sola vez, duró sólo un instante.

Una vez que Obama dijo "So help me God", el hito se cumplió y a otra cosa. En los cuatro años que le quedan por delante ejercerá su poder como un negro o blanco más. ¿Qué más da?

La época de las reivindicaciones raciales fue en los años '60, ahora no hay nada por conseguir ni por lo que luchar para la gente desciende de los esclavos, que no sea lo que le interese también al resto de la población.

Foto de El Mundo.

1 comentario:

Klaus Pieslinger dijo...

Esto de la reivindicación racial también me resulta denso, especialmente viniendo de los paparulos que lo destacan con ironía tratándose de Estados Unidos.
Yo prefiero cambiar los acentos en la misma lectura:

El primer presidente negro del mundo desarrollado, no es alemán ni austríaco ni suizo. No es francés, español o italiano. No es de los paises bajos. No es inglés, irlandés ni canadiense. No es japonés por supuesto, ni brasilero ya que estamos.
El primer presidente negro del mundo desarrollado, es en los Estados Unidos de América.