Justicia! (glup)

Cumbio

Parece que los integrantes de Callejeros finalmente prestarán declaración.
No estoy en el caso ni hago Penal, pero un rápido repaso del Código -Título VII, Delitos contra la seguridad pública, Capítulo I- Incendios y otros estragos- nos permite fácilmente advertir que la actual imputación de 'estrago doloso' es un absurdo jurídico.
Bueno, Omar no causó el incendio, y si algo tuvo que ver con el tema de la salida de emergencia clausurada o con candado, eso como máximo es negligencia.
Igual concepto debe aplicarse sobre su responsabilidad en el material con que estaba hecho el techo que ardió, en el marco de ciertas circunstancias confusas compartidas con el Gobierno de la Ciudad y con Bomberos, que debían controlarlo y no lo hicieron.
Obviamente, la figura penal del homicidio culposo contempla aquellos casos en los cuales la imprudencia, la negligencia o la impericia es lo que causa -sin intención- la muerte de alguien.
Y el hecho que hayan muerto -lamentablemente- muchas personas, no cambia prácticamente nada, porque -desde el punto de vista Penal- el concepto no se modifica mucho por el número de fallecidos, ya que si hay más de uno sólo aumenta en dos años el mínimo de la pena, y desde el punto de vista jurídico dan lo mismo 2 que 200 o 1000 o lo que se te ocurra.
Teniendo en cuenta que no se han podido identificar a los que encendieron las bengalas -tal vez estén muertos, en cuyo caso la acción penal se extinguió- los verdaderos autores materiales están ausentes en el juicio.
Pero aún si hubiesen sido identificados y estuvieran presentes, no podrían atribuirles a ellos intenciones homicidas, sino solamente una grave irresponsabilidad.
Lo mismo a las madrecitas que dejaron a sus hijos en la imprudente guardería-baño que habían establecido ahí.
Y desde el punto de vista Civil, la Ciudad es la que finalmente de alguna manera -sí o sí- pagará los daños.
Puestos a Derecho, Chabán y Callejeros tendrían que haber interrumpido el juicio proponiendo una 'probation', y 'a la casa'.
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Para evitar males mayores, sugiero que los jueces manden su sentencia por correo electrónico, así cuando los reclamantes incendien intencionalmente el tribunal,  ellos estén a salvo en sus guaridas.
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Los fenómenos mediáticos y una justicia corrupta y temerosa son las causas de estas aberraciones.
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PS: la imagen de Cumbio que ilustra el post no tiene nada que ver con el tema, por supuesto.

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