24 de septiembre de 2009

Después de La Haya


Falta poco para que falle es tribunal de La Haya, previsiblemente haciendo pelota los argumentos argentinos contra las papeleras, que no solo son ficticios sino que ya se supo, han sido pésimamente argumentados.
En un país normal nunca hubiera ocurrido el corte de la ruta, que implicó la desactivación de una ruta de importancia regional, con la consecuencia de pérdidas económicas aún no estudiadas.
la pregunta es qué va a pasar con un resultado en contra. ¿Alguien se va a tomar el trabajo de restablecer la normalidad y pedir las disculpas del caso, o habrá que esperar un par de décadas hasta que algún gobierno medianamente razonable se ponga las pilas y lo haga?

Voto por lo segundo.

1 comentario:

Klaus Pieslinger dijo...

La novedad post-fallo será que deberemos afrontar los costos de terapia de los "asambleístas" quienes habían descubierto el sentido de su vida tomando mates sentados en reposteras en medio de las rutas.