14 de octubre de 2010

Paradoja



Diez actos en siete estados en menos de 12 días. La agenda de Michelle Obama echa humo. Las elecciones legislativas del próximo 2 de noviembre están obligando a que se saque toda la artillería y quien mejor que la primera dama, con índices de popularidad por encima de su marido, para ganarse el voto.

El Mundo (España)


Siempre me pasa lo mismo cuando leo noticias que muestran la enorme relevancia que tiene la Primera Dama en Estados Unidos. Se trate de Laura Bush o de la esposa de Obama veo la situación igualmente absurda, lindante con un sistema monárquico en el que poder parece repartirse en una pareja gobernante.

Por otro lado me doy cuenta de que Michelle Obama fue en cierta forma elegida por los estadounidenses casi al mismo nivel que su marido. Estuvo sometida al escrutinio público casi tanto como Obama. En definitiva creo que los norteamericanos en el momento de la elección conocían más lo que se podía esperar de Michelle Obama que lo que muchos argentinos conocíamos a la Cris y a Cobos.

1 comentario:

Martín Benegas dijo...

Para mi siempre fueron adornos, yo no se por que son tan populares, por ejemplo Jackie Kennedy, ¿Cuando en su vida laburó?